
Cada primavera, el Valle del Jerte, en la provincia de Cáceres, se convierte en un escenario efímero y fascinante. Más de un millón y medio de cerezos se visten de blanco y tiñen las laderas de este enclave extremeño con un manto de flores que atrae a visitantes de todas partes del país (y del mundo), deseosos de presenciar uno de los espectáculos naturales más bellos de nuestra geografía.
La floración del cerezo no tiene una fecha fija: es caprichosa, depende del clima y varía cada año. Por eso, cada temporada, turistas y amantes de la naturaleza siguen con atención las actualizaciones que ofrece la Oficina de Turismo del Valle del Jerte.
Precisamente esta semana han dado el esperado pistoletazo de salida: la floración ha comenzado oficialmente y se espera que alcance su punto álgido durante los próximos días, especialmente en las zonas bajas y medias del valle.
¿Cuándo y dónde ver la floración del cerezo?
Los expertos lo tienen claro: ahora es el momento ideal para visitar el Jerte, al menos hasta finales de la próxima semana. Las áreas más bajas ya están cubiertas de flores y, como ocurre cada año, el espectáculo irá "subiendo" en altitud, prolongándose en las zonas altas hasta entrado abril. En cuanto a si se podrá disfrutar durante Semana Santa, desde la Oficina de Turismo explican que probablemente sí, especialmente en los pueblos de mayor altitud, aunque no pueden asegurarlo con total certeza.
Para contemplar este fenómeno en todo su esplendor, lo más recomendable es recorrer los distintos pueblos del Valle del Jerte, cada uno con su personalidad, tradiciones y miradores privilegiados. Es importante tener en cuenta que no todos los cerezos florecen al mismo tiempo: el proceso comienza en las zonas más cálidas del valle y va ascendiendo hacia las más frías, lo que permite disfrutar de la floración de forma escalonada durante unas dos semanas.
Dos rutas para disfrutar de la floración de los cerezos
Para quienes quieran planificar su escapada y disfrutar de este espectáculo en todo su esplendor, existen dos rutas especialmente recomendables:
Ruta lineal (N-110): 30 km de belleza junto al río
Esta ruta sigue el curso del río Jerte y atraviesa algunos de los pueblos más emblemáticos del valle: Navaconcejo, conocido por su arquitectura popular y el paraje natural de la garganta de Las Nogaleas; Cabezuela del Valle, con su casco antiguo declarado Bien de Interés Cultural; Jerte, que da nombre al valle y ofrece senderos que se adentran en la Reserva Natural Garganta de los Infiernos; Tornavacas, un pueblo con encanto serrano, y finalmente el Puerto de Tornavacas, desde donde se obtiene una de las vistas panorámicas más impactantes del valle en flor.
Ruta circular: 50 km para descubrir joyas escondidas
Ideal para los que quieran adentrarse por carreteras secundarias y conocer otros pueblos con menos afluencia turística pero un encanto indiscutible. La ruta pasa por Valdastillas, famoso por su producción de cereza y sus calles empinadas; Piornal, el pueblo más alto de Extremadura, conocido por su fiesta del Jarramplas; Barrado, con sus tradicionales balconadas de madera; Cabrero y Casas del Castañar, dos pequeños pueblos rodeados de castaños y cerezales; El Torno, conocido como el “mirador del Jerte” por sus vistas privilegiadas, y Rebollar, que guarda con celo su arquitectura tradicional y sabor rural.
Imágenes | Turismo Valle del Jerte