Vivir mas allá del Círculo Polar Ártico ya tiene sus características propias como para decir que no es fácil. Es una tierra de extremos ya que la vida oscila entre los grados bajo cero durante meses, a los días de sol eterno, y tanto te regala magníficas auroras boreales como te amenaza con que tu ciudad sea devorada por la tierra.
La ciudad de Kiruna ya de por sí tiene unas cuantas curiosidades que contamos aquí en Diario del Viajero hace un tiempo. Es una gran ciudad que ve cómo los turistas apenas llegan a ella, de paso hacia el hotel de hielo mas grande del mundo. A pesar de contar con atractivos propios, como una de las iglesias de madera más antiguas de Suecia (y la mas bella, según los propios suecos), pocos son los que hacen los 15 minutos de viaje entre el hotel y la ciudad.
Kiruna vive casi exclusivamente de la explotación de una mina a cielo abierto. La extracción de hierro sustenta la vida y la economía de la ciudad, y le ha dado su fisonomía actual... y hasta puede devorarla.
Hace una década, la empresa minera llegó a la conclusión que necesitaba expandir las bocas abiertas para la extracción y que para ellos la ciudad debería mudarse. La geología manda en estos temas, y la superficie donde hoy se levantan casa, escuelas y calles, será devorada por el futuro cráter que permitirá extraer mas hierro.
Por lo tanto, los suecos han puesto manos a la obra y comienzan a construir una ciudad satélite a unos 5 kilómetros al este de Kiruna. Hacia allí, y en el lapso de 15 años, se trasladarán 30.000 vecinos de la ciudad que hoy viven principalmente en el extremo oeste y noroeste de la misma. Los que hoy viven, digamos, en el borde de la mina.
Esta mudanza, por lo pronto, permitirá a la ciudad ganar en ciertas infraestructuras que el antiguo pueblo minero que dio origen a la ciudad actual no aspiraba tener: centros culturales, piscina, teatro, etc. será la oportunidad para que la población de Kiruna gane en calidad de vida, aúna costa de perder parte de su territorio.
El proyecto está tomando forma, y se espera que para 2016 ya comiencen a verse los primer edificios habitados (de los 3.000 que se levantarán), así como en nuevo Ayuntamiento y las primeras plazas. El diseño urbanístico será mas acorde con la naturaleza del clima del lugar, con calles mas estrechas y orientadas de tal forma que corten los vientos helados del norte, y también con un sentido mas sostenible, priorizando el transporte público y las zonas peatonales frente al tráfico de coche particulares.
Tal vez la nueva Kiruna sea entonces mas atractiva para los viajeros.
Vía | BBC En Diario del Viajero | Aeropuerto espacial en Suecia