"Este hayedo es sencillamente mágico". "Cuando estás aquí sientes un aura especial". Estos son algunos de los comentarios que se pueden encontrar cuando buscas información sobre el tesoro natural que alberga el corazón de la Sierra de Ayllón, entre Segovia y Guadalajara.
Sin duda, el Hayedo de la Pedrosa es uno de los secretos mejor guardados de Castilla y León. Este rincón natural es un tesoro de biodiversidad y belleza escénica, que en otoño se transforma en un espectáculo de colores creando una atmósfera única que cada año atrae a turistas y fotógrafos.
Aunque a simple vista pueda parecer otro hayedo de los muchos que tenemos en España, está considerado como uno de los más meridionales de Europa y se destaca de otros por su particular ubicación y antigüedad. Mientras que la gran mayoría se concentran en zonas de clima más húmedo y al norte de la península, el Hayedo de la Pedrosa sobrevive en un entorno montañoso y de clima continental, adaptándose a condiciones más secas y a temperaturas extremas. Esto le da un carácter robusto y salvaje, donde las hayas se aferran a un terreno rocoso y empinado, creando un paisaje espectacular.
Una ruta para conectar con la naturaleza
Explorar el Hayedo de la Pedrosa es una experiencia tranquila y enriquecedora. Aunque no tiene una gran extensión, los árboles aquí son de gran tamaño, pero su disposición es más irregular, permitiendo vistas de las montañas de Ayllón. Además, cuenta con una biodiversidad destacable en la que se encuentran tejos, acebos y robles y posee rutas de diferentes niveles que permiten disfrutarlo plenamente
La ruta principal es circular, comienza en la carretera SG-112 que une las localidades de Riofrío de Riaza y La Hiruela, en el Puerto de la Quesera. Desde aquí, un camino señalizado se adentra en el hayedo, ofreciendo a los senderistas una caminata de aproximadamente 4 kilómetros. Este trayecto es de dificultad media-baja, aunque en época de lluvias puede presentar cierto resbaladizo en algunas áreas, por lo que es recomendable usar botas de senderismo impermeables y llevar un bastón de apoyo. A lo largo de la ruta, se pueden disfrutar de miradores naturales y claros donde contemplar el bosque y las vistas de la sierra.
La época ideal para visitarlo es durante el otoño, de mediados de octubre a principios de noviembre, cuando el follaje alcanza su máximo esplendor. No obstante, cada estación tiene su atractivo: en primavera, la vegetación revive con tonos verdes vibrantes, mientras que en invierno es común ver las ramas de las hayas cubiertas de nieve, ofreciendo un paisaje completamente diferente.
Consejos prácticos para disfrutar del hayedo
Para disfrutar al máximo de la experiencia, es esencial tener en cuenta algunos consejos útiles:
- Acceso y aparcamiento: El Hayedo de la Pedrosa no cuenta con estacionamiento formal, por lo que se recomienda aparcar en los márgenes de la carretera SG-112, en áreas habilitadas, evitando obstruir el paso. Al ser un lugar cada vez más popular en otoño, es aconsejable llegar temprano en la mañana o en días entre semana para evitar multitudes.
- Llevar ropa y calzado adecuados: El clima en la sierra puede cambiar rápidamente. Es esencial llevar capas, una chaqueta cortavientos y calzado resistente al agua, sobre todo en otoño e invierno.
- Respetar el entorno: El hayedo es una zona protegida; se recomienda seguir siempre los senderos señalizados para evitar dañar el ecosistema. También, al ser un espacio natural, es fundamental llevarse toda la basura y respetar las normas de silencio para no alterar la fauna local.
- Aprovechar la visita para conocer los alrededores: La zona de la Sierra de Ayllón cuenta con pueblos de gran encanto, como Riaza y Ayllón, donde los visitantes pueden disfrutar de la gastronomía castellana, probar platos tradicionales como el cordero asado o las judiones de la sierra, y hospedarse en acogedores alojamientos rurales.
Imagen |Armando Gonzalez Alameda - Trabajo propio, CC BY-SA 4.0, Enlace