Para algunos será original, para otros, absurda, pero sin duda la iniciativa de impulsar el golf urbano para potenciar la oferta turística de la ciudad de Friburgo es llamativa.
De hecho, es un experimento pionero en un país que cuenta con varios campos de golf tradicionales. Pero este campo no tiene nada de tradicional.
Es un recorrido improvisado de 18 hoyos de cuatro horas de duración con el que amantes del golf pero fundamentalmente cualquier turista puede conocer la ciudad de una manera diferente.
El campo urbano permite descubrir vistas privilegiadas de la catedral gótica, de la ciudad medieval, sus murallas, el río Sarine y recorrer las calles de Friburgo repletas de cuestas.
Hay ciertas diferencias con el juego tradicional. Se utiliza un solo palo, una bola especial (más liviana y de goma), no hay banderas marcando los hoyos y se requieren 7 golpes por hoyo, aunque las reglas no son tan estrictas.
En todo caso, la consigna es divertirse y conocer la capital medieval del cantón suizo, uno de los centros históricos mejor conservados de Suiza.
Vía | Yahoo News Más información | Swissinfo.org