Parece increible, pero hace un par de días leímos la noticia en varios sitios: cuatro aviones de la compañía de bajo coste Ryanair fueron alcanzados por rayos el mismo día, mientras trataban de alcanzar el aeropuerto de Santander.
Es cierto que esta última semana hemos tenido en la costa norte de España, desde donde escribo, una actividad tormentosa excesiva para esta época del año. Pero incluso el portavoz de la compañía Peter Sherrard tuvo que admitir que la coincidencia había sido del todo inusual.
Tres de los aviones aterrizaron sin problemas en Santander, mientras que el cuarto tuvo que ser desviado a Valladolid. Los cuatro aparatos fueron inspeccionados por ingenieros una vez en tierra. Lo más extraño es que ninguna otra compañía aérea reportó problemas con rayos en la zona.