No más fotos de viaje movidas. Tampoco habrá que cargar con un trípode grande y pesado. Han inventado un trípode confeccionado en un material maleable que permite adaptarse a cualquier superficie, por lo que siempre podrás apoyar firmemente tu cámara para llevarte el recuerdo a casa.
Está confeccionado con polímeros (esos materiales nuevos que parecen darnos soluciones para casi todo). Sólo tienes que enroscar tu cámara, y darle forma al trípode con tus manos como si fuera una bolsita de plastilina para darle la forma que necesitas.
Además, para tus viajes a la playa, es resistente al agua.
Se vende desde su sitio web , cuesta 30 libras y la funda para llevarlo, otras tantas.
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