La fe mueve montañas, y también millones de personas alrededor del mundo. El turismo religioso es un fenómeno cuyo inicio se pierde en el tiempo y que hoy en día es una gran industria. Lourdes, en Francia, es uno de los centros de peregrinación más conocidos.
Lourdes se ubica en la región del Mediodía francés, a 400 metros de altura cerca de los Pirineos. Su fama es debida a los milagros atribuidos a su Virgen y por los efectos sanadores de las aguas del río Gave de Pau.
El lugar hacia donde peregrinan 6 millones de personas cada año, es su Basílica, de estilo romano-bizantino. Está construida en el lugar donde Marie-Bernarde vió la imágen de la Virgen en 18 ocasiones.
El complejo arquitectónico incluye a la Basílica de Nuestra Señora del Rosario, la Basílica de la Inmaculada Concepción, la Capilla de la Reconciliación y numerosas tuberías en las que los fieles recolectan el agua a la cual se atribuye poderes curativos. La gruta, en la cual se aparecía la hoy llamada Virgen de Lourdes, es visitada por unos 6 millones de turistas al año
El itinerario obligado sigue las huellas de Bernardette: desde la habitación en la que nació hasta el camino que realizaba para llegar hasta la gruta en la que se encontraba con la Inmaculada Concepción.
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