En esta ocasión y continuando con los artículos sobre Semana Santa, vamos a hablar sobre la ciudad de Frankfurt en Alemania. Normalmente la gente le llama simplemente Frankfurt, pero su nombre completo es Frankfurt am Main para distinguirla de 'la otra Frankfurt' que está ubicada al este del país.
Frankfurt es uno de los centros financieros más importantes de Europa, de hecho en esta ciudad de ubica la sede del Banco Central Europeo, entre otras 370 sedes bancarias. Además, en su moderno recinto ferial: Messe Frankfurt, se organizan cada año numerosas ferias internacionales de diferentes sectores industriales.
Aunque aparentemente puede parecer un lugar enfocado a las finanzas y a los negocios, Frankfurt es una ciudad fascinante para pasar unos cuantos días de vacaciones. Así que vamos a hacer un pequeño recorrido por esta ciudad a ver si nos convence.
Al bajar en Hauptbahnof (Estación Central), tenemos ante nosotros un horizonte dominado por los rascacielos de Mainhattan. Este juego de palabras se entiende fácilmente cuando paseamos por debajo de estos enormes edificios que recuerdan rápidamente a la ciudad de Nueva York.
Para llegar hasta ellos, primero pasaremos por alguno de los puentes sobre el río Main. Por ello Frankfurt am Main significa: Fráncfort del Meno en alemán.
Frankfurt se divide en la ciudad antigua (Altstadt) situada a orillas río y la ciudad nueva (Neustadt), hacia el norte del casco antiguo. La parte antigua todavía conserva un aire medieval que se ha sabido conservar perfectamente.
Después de visitar el casco antiguo, podemos dar una vuelta por delante del inmenso recinto ferial que está custodiado por la enorme estatua que vemos a continuación.
Otra opción que nos ofrece Frankfurt es un enorme mercado de coches de ocasión. Es impresionante visitar los gigantescos concesionarios que se pueden encontrar en la calle: Heerstraße. ¿Quién sabe?, a lo mejor volvemos a casa con un coche nuevo.
Fotos | ILoveMyPiccolo, Fernando Mayor, aj82 Diario del Viajero | Semana Santa 2009: Costa atlántica argentina Diario del Viajero | Semana Santa 2007