Las Minas de Sal de Wieliczka, situadas en la ciudad polaca del mismo nombre en las cercanías de Cracovia, datan del siglo XIII, cuando empezaron a ser explotadas para producir sal de mesa.
Tienen una profundidad de unos 327 metros (algo menos que una mina de carbón asturiana por ejemplo) y una longitud de unos 300 kilometros.
Lo que las hace especial es que son un auténtico museo subterráneo, con estatuas esculpidas en la roca de sal por los mineros, cámaras y capillas, un lago subterráneo y exposiciones sobre la historia de la minería de sal.
Se pueden recorrer mediante un recorrido turístico de unos tres kilómetros y medio y, según nos cuenta Kike en su blog Papelera 21, dentro hace un frío de mil demonios.
Las minas siguen activas actualmente, aunque al parecer ya no generan beneficios, y fueron declaradas en 1978 Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Precisamente Kike nos avisa de que podemos ver en su blog una galería de fotos de las minas que realizó durante su visita a las mismas. Les aseguro que merece la pena.
Fotos | Minas de Sal de Wieliczka (Papelera21) Sitio Oficial | Wieliczka Salt Mine (Tourist Route) En Diario del Viajero | Minas de Sal de Wieliczka, un tesoro subterráneo