La Markplatz es el centro neurálgico de Bremen, situada en el centro del casco antiguo de la ciudad. Es una zona peatonal, aunque está atravesada por el tranvía que recorre la urbe y en ella nos encontramos varios de los edificios más emblemáticos de la misma.
Así nos vamos a topar en primer lugar con el vetusto Ayuntamiento, con algo más de 600 años de antigüedad, al que se le añadió la fachada actual en el llamado estilo renacimiento Weser.
Frente a él y presidiendo la plaza se alza la estatua de Rolando, declarada Patrimonio de la Humanidad de la Unesco en 2004. Aunque la estatua en sí mide algo más de cinco metros, si sumamos el pedestal y la columna rematada con un baldaquino, todo el conjunto supera los diez metros. La leyenda dice que mientras Rolando siga en pie, Bremen será libre e independiente, y es por esto que existe una copia en los sótanos del Ayuntamiento por si hubiera que sustituirla rápidamente. Data de 1404, fecha en la que sustituyó a otra estatua de Rolando anterior que fue quemada.
En el otro extremo de la plaza nos encontramos con la Catedral de San Pedro, que con sus dos bellas torres es otro símbolo de la ciudad. Lo que vemos hoy día responde a las remodelaciones acontecidas en el siglo XIII bajo el estilo gótico y las sucesivas que se prolongaron hasta el siglo XVI, ya que anteriormente, en 1041, el templo fue devastado por un incendio.
En el lateral de la plaza más próximo al río se abre hacia él la calle Bottcherstrasse, una callejuela estrecha de unos cien metros de longitud con edificios de estilo expresionista. Cuenta la calle con diferentes restaurantes, así como varias tiendas de artesanía. En la pequeña plaza que se abre en el centro de la calle podremos admirar un espléndido carillón formado por 30 campanas de porcelana de Meissen, que a determinadas horas del día - indicadas en un cartel – sorprende a los visitantes con su música.
Fotos | José Antonio Onieva En Diario del Viajero | El barrio de Schnoor de Bremen