Ya veníamos anunciando que cuando el AVE Madrid-Barcelona estuviera finalmente listo para lanzarse a las vías, estallaría la lucha cuerpo a cuerpo entre las dos opciones que tienen los viajeros: tren rápido o avión.
El AVE, por su parte, busca el punto flaco de las aerolíneas para atraer clientela. Apuesta por la buena mesa de la mano del chef Jordi Cruz, poseedor de una estrella Michelin para servir en los trenes desayuno, almuerzo y cena además de servicio de cafetería y bocadillos varios todo el día. Para quienes viajen en Preferente o Club, el menú estará incluido en el billete.
Ese es un buen filón para enfrentar a la competencia. Las aerolíneas no pueden vanagloriarse de su buena comida, apenas si te ofrecen un bodillo que lo tienes que pagar, y caro.
Parece verse venir por donde van los tiros. Ayer se han vendido casi 14.000 billetes del AVE Barcelona-Madrid, una cifra récord y hasta el Barça ha pedido presupuesto para viajar en tren.
Por su parte, las compañías aéreas no se rinden. Esperan a conocer el impacto que tendrá el AVE en el público para reformar sus tarifas, cosa de que el precio sea decisivo a la hora de escoger.
Sin embrago, hay quienes prefieren pagar un poco más con tal de ahorrarse el tiempo de ir al aeropuerto con antelación más el que se pierde en transportarse de la terminal al centro de la ciudad. Y ni hablemos de los inesperados retrasos en los vuelos.
Lo cierto es que se ha declarado la guerra y a partir de ahora ninguno de los dos podrá bajar la guardia. Los viajeros estarán atentos a partir del 20F para atrapar la oferta que más les convenga, como debe ser. ¿Tú con cuál te quedas?
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