Dentro del conjunto de Pueblos Blancos de Cádiz nos encontramos con la sorprendente fisionomía de Setenil de las Bodegas, un municipio de apenas 3.000 habitantes cuyo principal atractivo es su propia figura incrustada en la roca.
Sus edificios derramados en pendiente desde el Castillo nos sorprenderán por la forma en la que se fusionan con los colosales trozos de piedra de la montaña moldeada por el curso del río Guadalporcún. Este tipo de construcción llamado “abrigo bajo rocas” que consiste en cerrar la pared de la masa rocosa, sin escavarla, construyendo debajo. Un paseo no apto para gente miedosa que no sea capaz de quitar de su mente el miedo a un desprendimiento. En estas rocas hay además varias cuevas de origen prehistórico.
Los lugares de mayor interior histórico son los restos del Castillo del que quedan buena parte de las murallas y la Torre del Homenaje, así como la Iglesia del pueblo, dedicada a San Sebastián. Cuenta la leyenda Isabel la Católica parió un hijo aquí al que pretendía llamar Sebastián y que murió unas pocas horas después del parto, levantándose la edificación religiosa en dicho lugar. Otro punto de interés es la antigua casa consistorial y no lejos, a unos 5 kilómentros, están los restos romanos de Acinipo.
Foto | riocura Web Oficial | Setenil En Diario del Viajero | La ruta de los pueblos blancos