Las celebraciones de Semana Santa en la ciudad de Granada conjugan una mezcla de tradiciones cristianas fuertemente teñidas de la herencia árabe de la antigua capital mora.
Con la Reconquista llevada a cabo por los Reyes Católicos, la Iglesia Católica utilizó todos sus esfuerzos para poder restablecer los valores y tradiciones cristianos, después de muchos siglos de influencia musulmana en la península. Es así que el carácter de las celebraciones granadinas son un maravilloso espectáculo. El ritmo de sus procesiones está marcado por el sonido de las cancionesy la música de las bandas que las acompañan.
En Granada se encuentran algunas de las imágenes religiosas más antiguas en su tipo. Los costaleros muestran una absoluta devoción por sus tronos y cada una de las cofradías tiene un fuerte carácter y personalidad forjada a lo largo de los siglos de tradición.
El Domingo de Ramos, es la cofradía de La Borriquilla la que da inicio a la semana de actos religiosos. Sale por la tarde por la calle San Jerónimo y es acompañada por los niños de la ciudad.
El lunes comienzan las procesiones que recuerdan los últimos días de Jesús. Este día salen las cofradías de La Luz (imágen: Santísimo Cristo del Trabajo y Nuestra Señora de la Luz, 100 nazarenos), Los Dolores (imágen: Nuestra Señora de los Dolores, 125 nazarenos) , El Rescate (imágen: Nuestro Padre Jesús del Rescate), El Huerto (imágenes: Nuestro Señor del Huerto de los Olivos y María Santísima de la Amargura) y San Agustín.
El martes es el turno de las siguientes cofradías: La Lanzada (Santísimo Cristo de la Lanzada y María Santísima de la Caridad, 120 nazarenos); el Via Crucis (imágen: Nuestro Padre Jesús de la Amargura y Nuestra Señora de los Reyes); la Esperanza (Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y Nuestra Señora de la Esperanza); la Cañilla (Señor de la Humildad y la Soledad de Nuestra Señora).
Entre todas las procesiones, una de las que más destaca por su belleza es la de El Silencio. Durante la noche del Jueves Santo, que es cuando ésta se celebra, las calles por las que va pasando permanecen completamente silenciosas y, a medida que la procesión va avanzando, las luces se van a apagando, contribuyendo a generar un ambiente sobrecogedor. Este impresionante espectáculo es conocido como “la Madrugá“, cuando la procesión va sumiendo en sombras la ciudad y se acerca el Viernes Santo. Sale sobre la medianoche y regresa cerca de las 4 de la madrugada.
Tal vez la procesión más conocida de Granada sea la de los Gitanos, que hace su recorrido el Miércoles Santo desde la Catedral hasta el barrio gitano del Sacromonte. Llevan las imágnes de Santísimo Cristo del Consuelo y de María Santísima del Sacromonte. Su paso es especialmente difícil debido a que las calles de su itinerario presentan empinadas subidas y las calles son verdaderamente angostas. Además, el dolor de las saetas acompaña espontáneamente su paso dándole el más tradicional tono flamenco. Su salida es a media tarde del Sagrado Corazón de Jesús recorriendo el centro de la ciudad. Tal vez el tramo más espectacular es su paso por el Paseo de los Tristes desde donde se tiene una maravillosa vista de la Alhambra. Su regreso al Sacromonte suele registrarse sobre la medianoche, después de horas de dolorosa procesión.
La Semana Santa en Granada nos sumerge en el mas puro ambiente místico y doliente de la Pasión de Cristo, con el sabor de la herencia árabe de sus calles.
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