Si tenemos la oportunidad de viajar, no debemos desaprovecharla. Incluso, en algunos casos, podría decirse que hasta puede llegara tener un efecto terapéutico.
En todo caso, cuando estemos por emprender un viaje, y en caso de estar recibiendo algún tipo de tratamiento médico, no debemos olvidarnos de tomar todas las medidas necesarias para no interrumpirlo.
Unos consejos básicos nos ayudarán a mantener del régimen de cuidado médico, aunque nos toque cambiar de hemisferio, husos horarios, costumbres y comidas.
- Consultar al médico antes de viajar sobre los medicamentos y cualquier riesgo relacionado con el destino elegido. Debe conocer perfectamente la freceuncia de medicación, los efectos colaterales, posibiilidad de alergias, contraindicaciones y la relación con la temperatura o la comida del lugar donde viajará.
Un seguro de viaje. Muchas compañías de salud poseen un servicio en el exterior para ayudarnos a reponer un medicamento que se haya olvidado o perdido. Considere las opciones de seguro médico de viaje.
Llevar los medicamentos a mano. De acuerdo a las últimas normativas, hay restricciones al tránsito de medicamentos. De todas formas, se recomienda llevar a mano los remedios de uso necesario durante el viaje y las recetas correspondientes que avalen su uso. Para el caso de viajeros hacia Estados Unidos (o que hagan una conexión aérea allí) sugerimos leer las recomendaciones de las autoridades aéreas americanas al respecto (¿ qué se puede llevar a mano, cómo y cuánto?)
Llevar copias de todas las recetas. En caso de pérdida o deterioro de los medicamentos originales, serán de vital importancia para que un médico del lugar pueda indicar un medicamento similar.
Considerar los cambios horarios En general, se sugiere que si el tiempo que se va a pasar en un destino es inferior a un día, conviene intentar mantener el esquema horario propio para tomar los medicamentos diarios. De todos modos, siempre es el médico quien nos aconsejará sobre las formas de ceñirnos a la rutina de medicación, tanto si se mantiene el esquema horario propio como si se lo adapta a la hora local. (A las 8 la pastilla rosa de la presión, pero ¿las 8 de acá o de allá?)
No olvidar la toma de la medicación. Aunque sea la hora de salida del autobús de la excursión, o estemos en mitad del paseo, o nos vaya a pillar embarcando en un tren/barco/avión, no podemos dejar de hacerlo. Se sugiere asociar la toma con una actividad cotidiana como lavarse los dientes. También podemos optar por llevarnos alguno de los sistemas de aviso para la toma de medicamentos.
Controlar dos veces que llevamos todo loque necesitamos. Medicamentos, isntrucciones, recetas y equipos de control personales (para la diabetes, tensión, etc.)
Vía | The Wall Street Journal