Uno de los lugares más bonitos de Nepal es la Patan Durbar Square o plaza real de Patan. Esta ciudad está ubicada en el Valle de Kathmandu, a pocos kilómetros de la capital de Nepal. La plaza y su conjunto arquitectónico es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, gracias a sus preciosos y antiguos edificios de arquitectura newarí y a sus hermosos colores rojizos.
Patan es en realidad una de las ciudades budistas más antiguas del mundo. También conocida como Lalitpur, esta pequeña joya fue fundada en el siglo III aC. Parece mentira que sea tan vetusta, ya que sus edificios históricos están muy bien conservados.
Como os he comentado, uno de los mayores atractivos de la ciudad es su preciosa Patan Durbar Square. A pesar de que ya hace más de tres años que la visité, tengo en mente el recuerdo de los fabulosos Krishna Mandir o el Hiranya Varna Mahavir, más conocido como el templo dorado de Patan.
No obstante, a pesar de la belleza del lugar y de la arquitectura newarí, lo mejor de Nepal y de esta Patan Durbar Square es su gente. Los nepalíes no paraban de sonreírnos y de tratarnos con una amabilidad sorprendente. Son de las personas más hospitalarias del mundo, pese a su pobreza. El trato de sus gentes, sumado al rojo de los edificios, el verde de las frutas y el blanco de las sonrisas, dibujaron un cuadro difícilmente equiparable en otro lugar del mundo.
Para completar su oferta de ocio, en la Patan Durbar Square podréis pasar una buena tarde paseando y visitando los puestecitos de artesanías o degustando la fabulosa comida nepalí en alguna de las muchas terrazas. Si estáis por Kathmandu y no sabéis que hacer, os recomiendo la Patan Durbar Square. Seguro que no os arrepentís de esta visita.
Imagen | Iryna Kuchma En Diario del viajero | Viaje a Nepal y norte de India: recomendaciones de la casa, Volar con halcones en Nepal