Si estás en un aeropuerto de Estado Unidos esperando para embarcar y se te acerca un desconocido para entablar conversación: sospecha. Puede ser mientras esperas para pasar por el escáner corporal o por el tradicional túnel de seguridad. O tal vez después de tener el visto bueno de la TSA y estás frente al monitor buscando tu puerta de embarque. O en el bar mientras haces tiempo, en una tienda comprando algo que se te olvidó, o en la misma puerta mientras esperas que llamen a embarcar.
Puedes haber sido elegido como objetivo del programa SPOT.
¿De qué se trata el programa SPOT?
Se aplicó por primer vez de forma experimental en el aeropuerto de Boston en el 2003, y está basado en las técnicas de espionaje (y contraespionaje) de los servicios secretos israelíes (que entrenaron a los primeros empleados de la TSA que lo pusieron en práctica).
Se trata de infiltrar a "observadores" (como eufemísticamente les llaman) entre los pasajeros, hacerse amiguete y sonsacarle información mientras comparten un café, les cuidan la maleta mientras van al baño, o matan juntos las horas de espera de un vuelo.
El programa SPOT lleva las siglas de Screening of Passengers by Observation Techniques, algo así como "control de pasajeros con técnicas de observación".
Desde el 2007 se han colado 3.000 oficiales de "observación" en 176 aeropuertos de Estrados Unidos. Este programa ha costado unos 200 millones de dólares al año (unos 1.400 hasta ahora). Después del último atentado en el Aeropuerto de Los Angeles, cuando una persona armada disparó contra otras en el control de seguridad, hiriendo a varios y matando a un oficial de la TSA, este programa está siendo cuestionado.
Este mes se decidirá en la Comisión de Transporte del Congreso si seguirán invirtiendo en agentes infiltrados entre los pasajeros, o si deciden suspender el Programa SPOT.
Foto | Robert S. Donovan En Diario del Viajero | Código Bravo: qué es y cómo actuar