La hemos visto en pelis americanas, en folletos y posters. Es el águila calva y por suerte va recuperando su población y está a punto de salir de la lista de especies amenazadas. Es un animal protegido y venerado en Estados Unidos. Es posible realizar salidas guiadas de avistamiento de águilas en parques y reservas naturales en diversos estados.
Hoy traemos la información recogida en la web de los Parques Estatales de Kentucky donde es posible realizar estas salidas durante el invierno. Una temporada ideal para observarlas de cerca, en los meses de enero y febrero. El águila calva se identifica claramente y se diferencia de su pariente, el águila real, por su cabeza de plumas blancas.
El águila calva es un animal bello e imponente. Puede llegar a tener hasta 2 metros de envergadura (de punta a punta de sus alas extendidas) y tiene un gran valor simbólico para los Estados Unidos, ya que hasta figura en su escudo nacional.
Las visitas para el avistamiento de águilas calvas en Kentucky se realizan durante enero y febrero en los parques estatales de Kentucky Dam Village, Lake Barkley y Kenlake y tienen un costo de entre 20 y 55 dólares por persona. En algunos casos, para llegar el punto de observación hay que navegar a través de los lagos de la zona, y en otros, subir hasta los picos más altos de estos parques.
Si te interesa participar debes consultar el calendario de visitar y reservar: Lake Barkley, Kentucky Dam y Kenlake.
Foto | Ian Cunnigham En Diario del Viajero | Mapa de los nombres nativos de Estados Unidos