Hasta hace apenas algunas décadas, durante el invierno los Inuits o esquimales de Nunavik, en el extremo norte de la región de Quebéc, Canadá, dormían en iglús construidos con bloques tallados en la nieve o el hielo.
Actualmente es posible vivir esta experiencia fuera de lo común en diferentes regiones de Quebec, en una variante del iglú llamada queenzy. No estamos hablando aquí de hoteles de hielo que se construyen cuando llega el invierno (como los hay también en Noruega o Groenlandia). El queenzy es en realidad un domo de nieve hecho a mano cuyo interior es excavado posteriormente. En su origen, eran elaborados por los amerindios como los Wendats y los Montañeses, entre otros. Estos son algunos de los lugares donde podrás pasar una noche invernal en un refugio de nieve, además de disfrutar de una variedad de actividades al aire libre. Esta experiencia se ofrece a niños y adultos:
Parque Nacional Monts-Valin, Quebec.
O en la Región de Mont Tremblant, Lauréntidas, Quebec.
Y si durante tu viaje a Canadá, quieres pasar un fin de semana distinto, también puedes fabricarte tú mismo el igloo.
Tengo entendido que en los Pirineos franceses también puede vivirse un fin de semana en un igloo. Si sabes dónde, cuéntanos.