El negocio de las islas privadas no sólo se orienta hacia actores y millonarios. Las empresas están empezando a ver con buenos ojos eso de tener un resort exclusivo para sus clientes o como incentivo para sus empleados.
En los años 70, la compañía de cruceros Norwegian Cruise Line compró a una empresa petrolera su Great Stirrup Cay y lo transformó en isla privada para sus pasajeros en pleno Caribe.
Más tarde se fueron agregando otras y así hoy muchas empresas turísticas disponene de sus privados "cotos" en lugares de paraíso.
Por ejemplo, si elegimos un crucero por las islas Fiji, podremos visitar las islas Drawaqa y Tivua del Captain Cook Cruise. En los mares orientales podremos visitar Nanuya Lai Lai de la Blue Lagoon Cruises.
La oferta en el Caribe es más amplia: Royal Caribbean cuenta entre su oferta con su isla privada de Coco Bay . Por su parte Royal Caribbean ofrece a Labadee, como resort privado para sus pasajeros.
También Costa Cruceros tiene su rincón exclusivo en Catalina Island; Disney y su Castaway Cay; Princess Cay de la Princess Cruises y Half Moon Cay de Holland America Cruises.
Si nuestro bolsillo no alcanza para realizar el sueño de la "isla privada" (al mejor estilo Onassis), al menos podremos estirarnos sobre la arena de una "casi" propia. A compartir con el resto de los 2.000 compañeros de crucero en cuestión.
Vía | Systemcover