Crece la tendencia a alojarse en establecimientos no convencionales en los viajes dentro del territorio español. Al menos así parece surgir de las estadísticas recientemente publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE)
Segun dichas cifras, la cantidad de pernoctaciones en alojamiento s turísticos colectivos extrahoteleros (apartamentos, campings y especialmente los de turismo rural) creció un 5,9% en el primer semestre del 2006, comparado con el mismo período del año anterior.
Si bien los turistas extranjeros (contabilizados como pernoctaciones de no residentes) eligieron nuevas versiones de alojamiento en su visita a España, fue la demanda de los propios residentes la que más aumentó en dicho período: un 14,2%
¿Qué significa ésto? Que los españoles y residente aquí, aceptan de muy buen grado la oferta ampliada y diversificada que cada vez más está al alcance de la mano. Las posadas, las rutas naturales, los alojamiento rurales van abriéndose paso lenta pero inexorablemente frente a la oferta ya conocida.
Asimismo, dentro de estas nuevas formas de alojamiento (que representa casi un 30 % de la oferta de alojamiento total), el turismo rural es el que más ha crecido en relación al año anterior y al resto de las opciones (12,5%).
A pesar de la aridez de los números, estadísticas y demás herramientas técnicas de análisis, las cifras nos terminan de confirmar lo que vemos en la calle y con amigos cuando llega el buen tiempo, o un puente se aproxima, y empezamos a buscar el rincón personalísimo donde disfrutar del tiempo libre.
Vía | El Economista