El skyline de Nueva York es una de las imágenes icónicas del mundo, tan reconocibles como el perfil de la Gran Pirámide de Guiza o la Torre Eiffel. Sin embargo, Nueva York es algo más que rascacielos. Su arquitectura es muy cinematográfica (no sabemos si es porque aparece reflejada en miles de películas o precisamente aparece porque le da empaque a cualquier producción), también las muchedumbres que avanzan como hormigas, los puentes, las calles. Todo tiene algo especial en Nueva York.
El problema es que lo hemos visto todo tantas veces y en tantas formas distintas, que es difícil que nos sorprendan. El vídeo que podéis ver a continuación, sin embargo, consigue hacerlo hasta el punto de que parece que contempléis una ciudad nueva (y estéis bajo los efectos de una fiebre o algún producto en mal estado).
El vídeo se ha concebido haciendo uso de zooms imposibles y raros, planos cenitales, curvas, movimientos de cámara anómalos, engaños perceptivos.
El montaje se llama Balance, y es obra de Brandon Bray y Tim Sessler. Las imágenes están rodadas en Manhattan, Brooklyn y algunas otras zonas de Nueva York, y para ello se usaron tomas desde drones y también desde helicópteros. Poned los altavoces, que la música hipnótica de Deaf Center también ayuda.
Imagen | Wikipedia
Vía | Microsiervos