Noticias de Chipre en Diario del Viajero
La isla de Chipre se encuentra a medio camino entre Europa y Asia, cerca de las costas de Líbano, Siria y Turquía, pero con una milenaria herencia cultural (y lingüística) griega. La República de Chipre pertenece a la Unión Europea y usa el euro. Por lo tanto, se puede viajar a ella sin limitaciones desde España. Es un destino turístico de creciente popularidad.
Pero hay un ‘pequeño’ problema. El tercio norte de la isla está controlado por la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre, no reconocida internacionalmente. La frontera entre ambas zonas es la llamada línea verde, fuertemente militarizada. Existen sólo cinco pasos fronterizos hacia el norte, y no se debe intentar cruzar por ningún otro lugar.
¿Cómo afecta esto a los viajeros? la Unión Europea reconoce toda la isla como parte de la República de Chipre (y por extensión, como parte de la propia UE), por lo tanto los movimientos entre el norte y el sur son, en teoría, libres. Sin embargo, en la práctica, el cruce entre el norte y el sur tiene ciertos requisitos que explicamos en este post.
Para empezar, saber por dónde se puede cruzar. En la capital, Nicosia (Lefkosía), existe un cruce para peatones (la ciudad tiene parte en cada sector) y otro para vehículos. Por el oeste existe otro paso en Zodia. En el este hay dos pasos, en Pérgamos y Strovilia, que unen el sector norte con la base soberana de Dhekelia, administrada por el Reino Unido.
Para entrar en Chipre, siempre que se haga en la zona controlada por el gobierno legítimo, basta el DNI. Es muy recomendable llevar el pasaporte, imprescindible para entrar en la zona norte.
Se debe evitar que las autoridades turcochipriotas sellen nuestro pasaporte, en su lugar deben expedir el “visado” en una hoja aparte. Un sello turcochipriota nos ocasionará problemas al volver a la parte sur y también al mostrar el pasaporte en Grecia (nunca puede ser excusa para denegarnos la entrada, pero es mejor evitar molestias innecesarias).
El carné de conducir español es válido en la República de Chipre, pero no es reconocido en el norte. Si se quiere viajar por toda la isla, es necesario el carné de conducir internacional, que se obtiene en la Jefatura Provincial de Tráfico presentando un carné válido español y pagando la tasa correspondiente. Asimismo, a la hora de viajar en coche, hay que tener en cuenta que los seguros del norte no cubren en el sur y viceversa, con lo que, si se cruza, hay que contratar dos seguros distintos.
Al viajar del norte al sur, hay que tener en cuenta que las autoridades de la República realizarán posiblemente un control exhaustivo de documentación y equipajes. Existen unas cantidades máximas de alcohol (un litro) y tabaco (40 cigarillos) que se pueden introducir desde el norte al sur. No se debe olvidar que en el norte la moneda oficial es la lira turca, aunque también se acepten euros.
Se debe tener cuidado si, por un casual, se llega a Chipre por avión al sector norte (sólo es posible hacer esto desde Turquía). El aeropuerto de Ercan no está reconocido internacionalmente (no hay forma de reclamar retrasos e incidencias, por tanto), y si se intenta cruzar al sur tendremos problemas por haber cruzado la frontera entre Turquía y Chipre de forma irregular.
Es recomendable no dejarse atraer por las ofertas de propiedad inmobiliaria a bajo precio en el norte de Chipre. Por lo general se trata de casas de los griegos que fueron expulsados de su legítima propiedad por los turcos. Además de las sentencias internacionales reconociendo el eventual derecho al retorno de esos refugiados, los contratos firmados en la ‘República Turca del Norte de Chipre’ no son reconocidos en ninguna otra parte del mundo.
¿Cuál es el origen de esta división? En 1974, un golpe de estado trató de integrar Chipre con el resto de Grecia (la llamada enosis), una aspiración histórica de la mayoría de la población (que es griega). El gobierno turco no lo toleró, y con objeto de ‘proteger’ a la minoría turca (algo más del 15%) invadió la isla. Finalmente consiguió controlar un 37% del territorio, del cual se expulsó a unos 150.000 chipriotas griegos.
A pesar de la condena internacional, la zona ocupada turca proclamó su independencia (no reconocida). La Unión Europea admitió a la República de Chipre como miembro, reconociéndole la soberanía de toda la isla, pero hoy por hoy el estado turco del norte sigue existiendo de facto. Los planes de reunificación han sido vistos con buenos ojos por los turcos, pero no por los griegos, que exigen el retorno de todos los refugiados y la expulsión de los colonos turcos que llegaron despues de la invasión.
Así las cosas, Chipre es el único país de Europa que sigue dividido por su particular ‘muro de la vergüenza’. Una lástima, ya que se trata de uno de los mayores paraísos del Mediterráneo.
Actualización: al igual que ya comentamos en el artículo sobre Transnistria hace unas semanas, es muy importante recordar que en el norte de Chipre los extranjeros no tienen protección diplomática, al tratarse de un estado no reconocido. Evitar problemas innecesarios es el consejo más obvio (especial atención con las instalaciones militares, esparcidas por doquier), pero en caso de que haya algún problema serio y no se pueda contactar con la embajada de España en la República de Chipre (en el sur), se debe contactar con el propio Ministerio de Asuntos Exteriores en España.
Imágenes | Frontera en Nicosia, Mapa de Chipre
Más información | Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación