Hay lugares mágicos por su origen, por su situación y por lo desconocido que irradian. El círculo de piedras más famosos del mundo es uno de ellos: inexplicable cómo se construyó, inexplicable lo que allí ocurre con el sol. Una vez al año se convierte en un lugar lleno de gente que busca energía, pero este año, será muy distinto, porque toca un solsticio de verano diferente en Stonehenge: en streaming y sin gente.
Durante 364 días al año hay que pagar entrada, ir por los caminos marcados y tiene horario de apertura y cierre. El día 20 de junio en Stonehenge se podía pasear libre, tocar y sentir la energía mientras se pone el sol y hasta que sale. Luego todo vuelve a la normalidad. El Coronavirus lo ha puesto todo en suspenso, pero desde casa lo podemos disfrutar.
Stonehenge es un monumento megalítico tipo crómlech, que además también presenta hoyos, fosos, montículos, etc., construido entre el final del Neolítico y principios de la Edad del Bronce, en el condado de Wiltshire, Inglaterra, a unos trece kilómetros al norte de Salisbury. Es uno de esos lugares mágicos por montones de razones, con una construcción casi inexplicable con los medios que tenían entonces y que está en un perfecto estado de conservación. Luce grandioso en un montículo elevado desde el que no se escucha el ruido de la carretera cercana y está rodeado de más restos a mayor o menor distancia.
En condiciones normales no puedes acercarte ni tocar las piedras, para su preservación, pero English Heritage, conocedores de lo que significa celebrar el día más largo del año ahí, cada 20 de junio levantan las reglas y la gente puede caminar entre el monumento y abrazarlo y tocarlo. Este año el Covid-19 se ha encargado de que el sol se ponga y salga sin compañía en la noche más corta. El año pasado se congregaron allí casi 10.000 personas: curiosos, druídas, chamanes, gentes buscando la magia del lugar, pero sobre todo deseosos de vivir una noche única.
Cerrado todavía hasta el día hasta el 4 de julio, English Heritage ha anunciado que retransmitirá en directo el solsticio de verano para que todos podamos disfrutar de ese mágico momento desde nuestras casas como si estuviéramos en las milenarias piedras de Stonehenge. El lugar elegido serán sus cuentas de Facebook y Twitter y ahí se podrá ver tanto la puesta de sol del día 20 (hoy, sí, hoy) y el amanecer del día 21.
Para tener claros los horarios, la retransmisión de la puesta de sol se iniciará 30 minutos antes, lo que equivale a las 22:26 (hora española). La segunda, el amanecer, en la madrugada del 21 de junio a las 5:52 (hora española). Por supuesto se podrá ver en diferido en las redes, lo dejarán ahí para que la gente lo disfrute.
Una vez que se recupere una cierta normalidad y abran hay algunos cambios. Por supuesto se sigue necesitando entrada reservada con franja horaria, pero desde el centro de visitantes pedirán encarecidamente que se suba andando al monumento dando un paseo por los 4,18 km, dando prioridad a las personas que no necesiten para usar el bus. En este caso, con mascarilla obligatoria, que también será necesaria si no se va a mantener la distancia de seguridad. Y la audioguía se puede descargar en el móvil, así que nada de olvidarse los auriculares.
Si aceptáis un consejo, cuando vayáis a Stonehenge (visita obligada ya os digo) dejad tiempo para pasear por Salisbury y visitad con calma su maravillosa Catedral, que tiene en exposición uno de los cuatro ejemplares de la Magna Carta, para hacer vuestro viaje mucho más completo.
Imágenes | Howard Walsh, Noah Jurik, linsusan1963, Noah Jurik en Pixabay