Casi 100 años separan esas dos imágenes que veis arriba, con un mismo protagonista, un arco de granito que daba acceso a la línea 1 del metro. Pues ha llegado el momento en el que la Gran Vía de Madrid recupere su templete histórico de entrada al Metro. No el original, aunque todavía existe, pero sí una réplica perfecta que recordará tiempos mejores.
La salida original de metro de Gran Vía estaba en la plazuela de la Red de San Luis y ahí se instaló el templete obra de Antonio Palacios que albergaba un ascensor para acceder a la estación. Cuando se construyó la Línea 5 se inauguraron nuevos pasos subterráneos y se anuló la salida, la idea es recuperarlo en todo su esplendor para el centenario de la inauguración del metro de Madrid.
El Templete de la Red de San Luis, que es así como lo llamaban, daba acceso desde el año 1919 a la primera línea de la red Norte-Sur del metro de Madrid. Era todo un símbolo para la capital de España hasta que fue desmontado en 1970 y por mediación del ex-alcalde Gonzalo Ordoñez Pérez terminó sus días en Porriño, localidad natal del arquitecto Antonio Palacios que fue quien lo diseñó. Casi 48 años lleva adornando el Campo da Feira de la localidad pontevedresa. El templete estaba cubierto de una marquesina de hierro y cristal y para acceder a la estación se podía utilizar una escalera de caracol que rodeaba el ascensor o bajar por el mismo, que tenía un coste adicional de 5 céntimos de peseta por su uso (1/3 el precio del billete en aquella época).
Ahora el Ayuntamiento de Madrid ha anunciado que va a destinar 276.000 euros para ejecutar el proyecto, que saldrá a concurso público, con el visto bueno de la Comisión Local de Patrimonio, y con vías a inaugurarlo en 2019. Lo que se va a hacer es una réplica del original lo más fiel posible, tendrá exactamente las mismas medidas y se colocará prácticamente en el mismo sitio: en la intersección entre la Gran Vía y la calle Montera. Parece ser que se planteó recuperar el original pero entre las reticencias del Ayuntamiento de Porriño a devolverlo y su estado de conservación se optó por hacer uno nuevo.
Lo que sí que aclaran es que volverá a incluir el ascensor de acceso, que contará con tecnología actualizada y que en cada nivel el acceso será el más adecuado para dar servicio a los cerca de 45.000 viajeros que lo usarían cada día. Tranquilos, nadie tendrá que pagar ahora para utilizarlo y desde luego será una nueva atracción a esa Gran Vía que está viviendo remodelaciones para devolvérsela al peatón y al transporte público.
Imágenes | Twitter Metro Madrid y Edvac
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