Las vistas más espectaculares de Irlanda están en el Parque Nacional de Connemara, y uno de los mejores sitios para disfrutarlas es la colina Diamond Hill. Esta colina es una de las pocas elevaciones que hay en el país, que prácticamente concentra sus pocas montañas en la zona de Galway.
Dentro del Parque Nacional de Connemara, podréis disfrutar de los más llamativos paisajes, destacando especialmente los que conseguiréis ver tras subir a la colina del diamante, la Diamond Hill. Para llegar allí, dado que el transporte público no cubre bien todo el territorio de Irlanda y menos fuera de temporada, hay varias opciones.
Lo más cómodo para viajar recorriendo Irlanda es alquilar un coche, ya que el transporte público es muy limitado. Os da más libertad de movimientos y no sale demasiado caro. Para llegar a la Diamond Hill, debéis llegar al Parque de Connemara, la esmeralda verde de Irlanda y una vez en la zona, lo mejor es dejar el coche en el pueblo de Letterfrack. Desde allí podéis ir en bicicleta o como yo, caminando, haciendo senderismo.
Subida a Diamond Hill, las mejores vistas de Irlanda
La ruta que lleva a subir la Diamond Hill es fácil, está bien señalizada y da la opción de hacer un círculo alrededor de la colina. Hacer el recorrido completo puede llevar alrededor de 3 horas y media, que pueden llegar a 4 o más si os detenéis a comer arriba. No es un sendero exigente por lo que es apto para todos los niveles.
A la vuelta, podéis regresar sobre vuestros pasos por el mismo camino, pero es mejor volver por la otra parte de la colina, porque merece la pena ver las dos caras de la Diamond Hill y las vistas completas de lo que se divisa desde allí.
El tiempo en la zona es muy cambiante por lo que es necesario llevarse unas buenas botas y un chubasquero, por lo que pueda suceder. A mí me cayó una tromba de agua impresionante, aunque luego, rápidamente, el día comenzó a abrir y se despejó. Con esto quiero deciros que no os fiéis mucho del tiempo, porque puede parecer que va a hacer un sol de escándalo y que en menos de 10 minutos se nuble y caiga un buen chaparrón.
A medida que vayáis subiendo tendréis buenas vistas sobre el Parque Nacional de Connemara. Desde la cara oeste de la colina se puede ver el impresionante lago de Kylemore, junto a la Abadía del mismo nombre. Pronto os hablaré de ellos.
Además tenéis a vuestro alcance las vistas del litoral irlandés, y podréis divisar Killary, el único fiordo en Irlanda, e incluso disfrutar con la vista los Twelve Bens, las montañas más famosas de Connemara.
En la cara este, está el lago Mask, se divisa el pueblo de Cong donde John Wayne rodó El Hombre Tranquilo y si el día está claro, se puede llegar a ver la pequeña ciudad de Clifden. Subir la colina Diamond Hill merece la pena por llegar a tener una idea del paisaje de ciénagas y lagos que ocupa todo el Parque Nacional de Connemara. Es impresionante y desolado, magnífico e inhóspito y además resulta único, impresionante, todo al mismo tiempo.
Desde arriba, las mejores vistas de Irlanda en pleno Parque Nacional de Connemara os darán la sensación de que estáis en un desierto de hierba. A vuestros pies, se extiende el territorio de la República de Irlanda, donde el tiempo parece detenerse, ¿qué más se puede pedir?
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Imagenes | Cosmo 71, Pakus, sammydavisdog