A grandes males, grandes soluciones. Si bien es cierto que Lufthansa estaba llevando adelante la fusión de sus dos compañías aéreas de bajo coste (Germanwings y Eurowings), la terrible tragedia sucedida hace pocas semanas cuando un avión de la primera de estas aéreas se estrelló en los Alpes franceses, ha acelerado este proceso.
La empresa alemana, propietaria de estas dos marcas de vuelos europeos de bajo costo, ha decidido unir ambas aéreas bajo el nombre de Eurowings a partir del próximo mes de noviembre.
Será a partir de ese mes cuando las rutas operadas hasta entonces por Germanwings tendrán un nuevo código que las identifique. Pasará de llevar el 4U delante del número de vuelo, a mostrar el EW de Eurowings.
Tampoco tenía mucho sentido mantener dos empresas casi similares duplicando estructuras, y por ello hace ya varios meses (mucho antes de la tragedia) se había comenzado este proceso de unión y optimización.
Desde mi punto de vista, la forma en que la aérea alemana dueña de Germanwings ha encarado el grave problema de enfrentarse a una tragedia aérea con tantas pérdidas humanas, ha mostrado una gran resolución y la voluntad de hacer frente a todo el hecho y sus consecuencias, con gran sinceridad.
Además, ha demostrado un exquisito trato con los familiares de las víctimas, respetuoso y solidario, mientras se siguen los pasos formales necesarios para resolver todos los trámites e indemnizaciones que surgen en estos tristes casos de accidentes.
En Diario del viajero | Razones del bajo coste de las low-cost