El otro día me preguntaban qué ver en Madrid en un viaje corto, así que he pensado que es una buena excusa para escribir un artículo contando el paseo que hago siempre que viene de visita alguien que aún no conoce la ciudad. Se trata de un recorrido que se puede hacer a pie sin problemas en una jornada y que nos llevará a ver los puntos turísticos más míticos de la ciudad.
Olvidaos del metro, no os hará falta. Se tarda sólo 1 hora y 40 minutos (a paso de Google) en hacer toda la ruta, pero calculad 2 horas o 2 y media para ir tranquilos, hacer fotos y todo eso. En principio, cuando realizo este recorrido de toma de contacto no incluyo visita a interiores, pero si queréis podéis valorarlo. También se puede hacer en el sentido contrario, aunque yo lo prefiero así porque creo que tiene más sentido recorrer la Gran Vía por orden cronológico, y además así tendréis las preciosas vistas del Edificio Metrópolis y del Edificio Carrión.
1. Puerta del Sol
Comenzamos en el que posiblemente sea el lugar más popular de la ciudad de Madrid, gracias a las Campanadas televisadas de Nochevieja, la Puerta del Sol. Allí veremos el edificio de la Real Casa de Correos, ahora sede de Presidencia de la Comunidad de Madrid, cuyo reloj es el famoso de la noche las uvas. Justo delante de este edificio encontramos en el suelo una placa metálica que marca el Kilómetro 0 de España. Ahí pondréis vuestros pies para sacar una foto.
Frente al edificio está el también mítico letrero luminoso de Tío Pepe, que ha cambiado hace poco de ubicación. Saludad a Carlos III que preside la plaza, buscad el Oso y el Madroño y, antes de iros de la plaza, discutid si os gusta o no la moderna boca de metro que parece un gusano de cristal.
2. La Carrera de San Jerónimo, Neptuno y El Paseo del Prado
Desde la Puerta del Sol tomaremos la Carrera de San Jerónimo donde nos toparemos con otro edificio mítico: el Palacio de las Cortes, o lo que es lo mismo, el Congreso de los Diputados. Está flanqueado por dos grandes leones de bronce, y también por bastantes policias.
Seguiremos bajando hasta la fuente de Neptuno, lugar que emocionará a quienes sientan los colores del Atlético de Madrid y cruzaremos la calle para llegar hasta el museo más famoso de España: El Prado. Tras ver este bonito edificio y presentar nuestros respetos ante las estatuas de Velázquez (fachada principal), Murillo (fachada sur) y Goya (fachada norte), seguiremos nuestra caminata por el Paseo del Prado hacia el norte.
3. La Cibeles y la Puerta de Alcalá
Si hace un momento se emocionaban los colchoneros, ahora es el turno de los merengues, pues pasamos ante la fuente de la Cibeles, lugar icónico para los aficionados del Real Madrid. Yo siempre que paso por aquí me acuerdo de A la sombra de un león, escrita por Sabina.
Subiremos por la Callé Alcalá (con la falda almidoná y los nardos apoyaos en la cadera es opcional) hasta llegar a la Puerta de Alcalá (Ahí está, ahí está, viendo pasar el tiempo) y le daremos una vuelta para comprobar que sus dos caras son diferenes. Una vez allí podéis entrar al Parque del Buen Retiro, pero recomiendo dejarlo para otro día para no cansaros y dejar el recorrido básico por Madrid a medias.
Mientras bajamos nuevamente por la calle Alcalá (la florista viene y va y sonríe descará) tendremos una primera vista bonita de la Gran Vía, a lo lejos, con Cibeles en medio. Mi recomendación es entrar al Palacio de Cibeles (sí, dije antes que no entraríamos a los edificios, pero es un momentito) y subir unas cuantas plantas para mirar por sus ventanales esa vista de la plaza que tiene delante.
4. Gran Vía
La arteria principal de Madrid es mi lugar favorito de la ciudad. Sabed que el primer tramo de calle que recorremos de Cibeles es todavía parte de la calle Alcalá, incluido el edificio Metrópolis. Junto a él, está el no menos bonito edificio Grassy, el número 1. Desde ahí comenzaréis un extenso paseo donde podréis contemplar los edificios emblemáticos de la Gran Vía, divididos en los tres tramos en que se articula la calle.
Contínua: Recorrido básico por el centro de Madrid (Parte 2)
Fotos | Roberto Arévalo y Álvaro Onieva
En Diario del Viajero | La Quinta de los Molinos: almendros en flor en Madrid