La Plaza Consistorial o del Ayuntamiento, tesoro arquitectónico de Pamplona
Muchos la conocen por el momento glorioso que vive el 6 de julio de cada año al comienzo de los Sanfermines, cuando tras el pregón se oye la frase de "¡Pamploneses, pamplonesas, Viva San Fermín, Gora San Fermín!" y suena el chupinazo que da comienzo a las fiestas. La Plaza Consistorial es la sede de su Ayuntamiento y es un auténtico tesoro arquitectónico de Pamplona y está situada en el centro del casco viejo de Pamplona.
Aunque en la televisión se ve muy grande cuando está llena de miles de personas vestidas de blanco y con su pañuelo rojo celebrando el comienzo de una de nuestras fiestas más internacionales del mundo, no es una plaza de gran tamaño.
El edificio del Ayuntamiento de Pamplona
En la Plaza Consistorial confluyen las calles de Santo Domingo y Mercaderes, y además de otros edificios, su construcción más importante es el edificio del Ayuntamiento, una construcción que se realizó en 1423, pero que fue derruida, construyéndose un nuevo edificio en 1753, de estilo rococó, cuya fachada sigue siendo la actual, aunque el edificio se ha vuelto a reconstruir en su interior en el año 1951 por el arquitecto José Yárnoz Orcoyen.
Es curiosa la ubicación del Ayuntamiento, que fue elegida en un punto sin edificaciones, que estuviera equidistante de las distintas poblaciones o burgos de Pamplona. Allí se construyó por disposición del Rey Carlos III de Navarra.
La construcción de 1753 fue obra del arquitecto Juan Miguel Goyeneta siendo la fachada de estilo Rococó una obra dos años posterior, realizada por José Zay y Lorda. Esta fachada, fue posteriormente modificada en la parte alta por otro arquitecto llamado Juan Lorenzo Catalán.
En la fachada, podemos ver distintas estatuas, y otros elementos decorativos y simbólicos que para su mejore entendimiento, os describimos a continuación:
En la parte superior de la fachada hay un hombre tocando la trompeta que simboliza la Fama, la Fama de Pamplona. A los lados, dos leones que sujetan dos escudos, el de la izquierda, es el de la Comunidad Foral de Navarra y el de la derecha, el de la Ciudad de Pamplona.
A los lados, dos figuras de Hércules que sujetan unas porras, simbolizando la fuerza de los navarros. Bajo ellos, las cuatro banderas de la ciudad de Pamplona, la bandera de España, la bandera de la Comunidad Foral de Navarra y la bandera Europea.
En la entrada del Ayuntamiento, hay dos figuras femeninas, que simbolizan dos virtudes o dos valores que deben regir un buen gobierno: La Justicia y la Prudencia. Están en la puerta para que los gobernantes de la ciudad al entrar al edificio, recuerden que deben ser prudentes y justos en las decisiones que tomen dentro.
Imágenes | Pakus, Wikimedia
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