Si el pasado miércoles os dábamos las claves para organizar un itinerario sencillo por el norte del país, hoy continuamos la guía para organizar vuestro primer viaje a India con varios lugares que si el tiempo os lo permite no podéis dejar de visitar.
Dentro de la zona que abarca el Triángulo de Oro, Rajasthan y Varanasi de la que hablábamos el último día hay un sinfín de ciudades y pueblos interesantes en los que haréis bien en deteneros si tenéis la posibilidad. Algunos ejemplos:
Pushkar. Es cierto, lo hemos calificado de paraíso backpacker, pero Pushkar es ante todo un lugar sagrado que merece la pena conocer y donde quienes pretenden descansar un par de días, al final se quedan cinco. Podéis llegar a Pushkar desde Jaipur.
Bikaner. La ciudad no tiene nada interesante, pero muy cerca, en Deshnoke, se encuentra Karni Mata: el templo de las ratas. Quienes padezcan de fobia a estos roedores será mejor que se salten esta parada…
Fatehpur Sikri. Esta ciudad fantasma por ella sola ya justifica el hecho de quedarse un día más en Agra. Situada a 40 kilómetros de la ciudad del Taj Mahal, su Gran Mezquita y el Panch Mahal son sólo dos de las muchas construcciones que podemos admirar en esta ciudad abandonada por la falta de agua y detenida en el tiempo.
Orchha. A medio camino entre Agra y Khajuraho, Orchha es uno de esos lugares que enamoran a quienes lo visitan. Un pequeño pueblo que aunque posee auténticas joyas arquitectónicas, su mayor encanto reside en su ambiente, en sus mercados y en la sonrisa de sus habitantes. Un lugar tranquilo donde empezar a descubrir la India rural.
Khajuraho. ¿Quién no ha oído hablar de los famosos templos eróticos de India? Se trata de uno de esos lugares donde, además de divertirnos buscando las figuras más “picantes”, podemos aprender mucho de la cultura de un país que en el pasado tenía muchos menos tabúes que en la actualidad. Si queréis saber cómo llegar, aquí os lo contamos.
Si vuestro viaje es aún más largo y queréis completar vuestro viaje con una extensión a algunas ciudades fuera del recorrido pero igualmente accesibles, aquí tenéis algunas sugerencias:
Amritsar. Una de las ciudades con más personalidad de India. La capital del sijismo precisa un desplazamiento a propósito desde Delhi, pero son tan sólo doce horas de tren que tienen su recompensa con la fabulosa visión del Templo Dorado. Una visita al Jallianwala Bagh os dará una perspectiva aún más amplia de la historia del país.
Kolkata. Para mi, una ciudad sencillamente fascinante. Puede que no entre dentro de los recorridos turísticos más típicos, pero la antigua capital colonial del Imperio Británico ofrece multitud de atractivos como estos.
Mumbai. Un buen lugar donde abrir miras y descubrir otra cara de India. La moderna Mumbai es, además de la capital cinematográfica del país, una buena parada intermedia para aquellos que se desplacen a las playas de Goa por tierra desde Udaipur, sea en autobús o tren.
Goa. Este estado del oeste de India es, nunca mejor dicho, un oásis de paz dentro del caos del país. Una excelente opción para terminar vuestro viaje descansando en sus playas infinitas, sin olvidar sus bellas e interesantes ciudades coloniales.
Por último, no queremos despedirnos sin recordaros que India es un país con una cultura y costumbres muy diferentes a las nuestras. Antes de partir, y para que el choque cultural sea menor, os recomendamos leer todo lo posible al respecto. Podéis empezar con estos artículos:
El caótico tráfico en la India
Experiencias de la India: los rickshaws
Costumbres de Asia: masticando paan
Introducción a la comida india
Secretos de India: el Bhang Lassi o la bebida del dios Shiva
Foto | Meena Kadri
En Diario del Viajero | Guía para organizar vuestro primer viaje a India (I), Guía para organizar vuestro primer viaje a India (II): itinerarios recomendados