Adentrarse en las entrañas de la tierra puede parecer el inicio de una novela de aventuras, pero este destino no es un relato de ficción: es una experiencia real que lleva a descubrir un tesoro natural escondido bajo un entorno serrano de verdes intensos a 230 metros de profundidad. ¿Lo mejor? Que está a tan solo dos horas de la ciudad de Sevilla.
Hablamos de la Mina de Sal-Gema de Loulé, una joya oculta en las profundidades donde se realiza uno de los oficios más antiguos de la zona del Algarve. Allí, los mineros siguen manteniendo con vida una de las industrias que aún hoy lleva el nombre de esta región por todo el mundo: la industria de la sal.
Sin embargo, esta no es la única joya que alberga la ciudad. Una vez arriba, te espera un sitio encantador con varias construcciones históricas, calles empedradas y talleres artesanales que abren sus puertas con los souvenirs más tradicionales.
Un tesoro que se esconde en las profundidades de la tierra algarvía
El viaje comienza con un descenso que equivale a bajar unos 12 edificios de 10 plantas. Una vez abajo, el paisaje cambia radicalmente: la mina te envuelve con un ambiente donde los colores, las texturas y el aire cargado de historia te trasladan a otro mundo. Este laberinto de galerías, con paredes de sal formadas hace más de 200 millones de años, es el escenario perfecto para aprender sobre uno de los oficios más antiguos de la región. La extracción de sal gema, considerada el "oro blanco" del lugar, sigue siendo una industria viva que combina tradición y modernidad.
Este recorrido de poco más de un kilómetro permite sumergirse en una experiencia única que permite descubrir los secretos geológicos de esta mina y observar cómo ha evolucionado la maquinaria utilizada en la extracción a lo largo de los años. Cada galería brinda el testimonio de cómo el hombre y la naturaleza han trabajado juntos para crear este impresionante escenario.
Pero la aventura no termina aquí. Una de las cuevas de esta mina alberga la exposición "Santa Bárbara, Patrona de los Mineros y Otras Artes", una colección única de esculturas, pinturas y artefactos religiosos provenientes de diferentes países y desarrollados con técnicas de ejecución diferentes.
También es hogar de una colorida muestra del artista contemporáneo Klaus Zylla, cuya obra ofrece un contraste fascinante con las paredes de sal que la rodean. Es una experiencia que mezcla cultura, arte y naturaleza como pocas en el mundo.
Loulé, una ciudad histórica llena de encanto
Después de explorar este paraíso subteráneo, la aventura continúa en la superficie. La ciudad de Loulé, con su castillo del siglo XIII y sus laberínticas calles empedradas, es el complemento perfecto para un día lleno de descubrimientos.
Explorar los monumentos que han resistido el paso del tiempo y recuerdan la importancia histórica que tuvo esta urbe musulmana entre los siglos VIII y XII es una experiencia muy enriquecedora. Sitios como los Baños Islámicos, antiguos baños públicos que se encuentran bajo los cimientos de una casa señorial del siglo XV y que fueron declarados Monumento Nacional en 2023 son una visita obligada para quienes visitan la ciudad.
Por otro lado, el mercado de Loulé, de estilo neoárabe, se erige como el verdadero corazón de la ciudad. Este precios edificio es una visita ideal para quienes desean degustar los sabores más auténticos de la gastronomía local o llevarse a casa alguna de las hermosas artesanías que se producen en la región. Es el lugar perfecto para empaparse de la esencia de esta ciudad y completar una jornada inolvidable.
Imágenes | Visit Algarve