El sábado pasado iniciaba un nuevo episodio de actividad volcánica del complejo volcánico Puyehue-Cordón El Caulle, ubicado a 900 kilómetros de Santiago de Chile, sobre los Andes en la frontera con Argentina. Tras una inusitada actividad sísmica en la zona, el volcán Puyehue dentro del cordón de El Caulle, volvió a la vida emitiendo una nube de ceniza volcánica que se eleva a los 15 kilómetros de altura.
La ceniza volcánica arrastrada por los vientos de la zona, llegaron a cubrir amplias zonas de terretorio chileno y argentino. Por ello, las autoridades chilenas alertaron en las últimas horas sobre el riesgo que reviste para la aeronavegación.
El Aeropuerto Internacional de la capital chilena canceló hoy los vuelos dirigidos a Buenos Aires y Montevideo debido a la nube de ceniza proveniente de la erupción del cordón volcánico de El Caulle, como dijimos, ubicado a 900 kilómetros de distancia.
Las rutas Santiago-Buenos Aires y Santiago-Montevideo se encuentran canceladas debido a que la nube de ceniza se desplazó desde la Cordillera de Los Andes hacia el norte y luego hacia el este, en dirección al Océano Atlántico.
La lluvia de ceniza paralizó las operaciones en los aeropuertos de las ciudades argentinas de Bariloche, Chapelco, Esquel, Trelew, Viedma y Bahía Blanca, los que se encuentran cerrados por disposición de la autoridad aeronáutica de ese país.
Las autoridades argentinas han previsto un calendario que deberá ajustarse de acuerdo a las condiciones que se presenten:
Hasta el próximo domingo 12 inclusive se cancelan los vuelos entre el aeroparque Jorge Newbery (Buenos Aires) y Bariloche, Chapelco, Esquel y viceversa. Hasta el jueves 9 inclusive, entre Aeroparque y Trelew, Neuquen, Viedma, Río Gallegos, Calafate, Ushuaia, Río Grande, Comodoro Rivadavia, Bahia Blanca, Santa Rosa, San Rafael y viceversa. Mientras que las operaciones nocturnas a Santiago de Chile y Mendoza, también serán suspendidas hasta el jueves 9 inclusive.
El Aeropuerto Internacional de Ezeiza opera normalmente en este momento por lo que la mayoría de los vuelos nacionales no sufren modificiones.
Hay que considerar que, desde el punto de vista turístico, esta nube de ceniza llega en un momento de temporada alta para las visitas a los centros de deportes de invierno que se encuentran precisamente en algunas de las zonas servidas por los aeropuertos cerrados, por lo que se prevé un enorme perjuicio para estos destinos.
Foto | NASA