Mientras que grandes cadenas hoteleras como Marriot o Westin se vuelven ciento por ciento libres de humo, SMINTAIR, una nueva aerolínea de lujo creada por un banquero alemán adicto al tabaco, permitirá fumar en sus aviones.
Irónicamente, las siglas no significan “aire mentolado”, sino Smoker´s International Airlines, la primera compañía aérea para fumadores, un original nicho de mercado para aquellos compulsivos reacios a dejar el hábito en la puerta del avión.
Es cierto que además de reacios deberán ser acaudalados, pues las tarifas son de alto standing, acordes a los lujos ofrecidos en vuelo como teléfono, DVD, TV, MP3 e Internet y todos los avances tecnológicos al servicio del pasajero.
En los dos Boeing 747 de la aerolínea no existe clase turista, sólo 108 asientos en clase business a 6.500 euros por plaza y 30 en primera clase a 10.000 euros. La parte de arriba del avión, que generlamente se usa para la clase turista, será destinada al lounge. La compañía “con humos” comenzará a volar de Dusseldorf a Tokio a partir de marzo del año próximo y planea ampliar sus rutas más adelante.
También se aceptan pasajeros no-fumadores, quienes según asegura la compañía ni siquiera sentirán el humo porque habrá dispositivos que refrescarán el aire y lo harán mucho más puro que el de cualquier avión.
El año próximo SMINTAIR dará que fumar y que hablar, y hasta tal vez se convierta en el inicio de un mercado del turismo de lujo para fumadores.