En el corazón de México, a pocas horas de Distrito Federal, se encuentra uno de los pueblos más interesantes y únicos de todo México: Real del Monte. Escondido entre las montañas del Estado de Hidalgo podemos encontrar un México, lindo y desconocido: Real del Monte, el pueblo más encantador de Hidalgo.
Real del Monte es un colorido pueblo minero de edificios muy antiguos, construidos en el siglo XVIII. Las montañas a su alrededor le convierten destino pintoresco y natural. Le rodean nada menos que las montañas de la Sierra Madre Oriental, dentro de la cual se encuentran dos Parques Naturales: el Parque Nacional el Chico y el Parque Estatal Bosque el Hiloche.
Yo recomiendo comenzar la visita cogiendo fuerzas y disfrutando de la riquísima gastronomía mexicana. “El serranillo” es un restaurante tradicional que ofrece todo tipo de platos típicos de la región de Hidalgo, comenzando por las pastes de papa y carne, -unas empanadillas rellenas típicas de la zona-, hasta enchiladas mineras, unas enchiladas creadas en Real del Monte.
Además, podréis encontrar todas las maravillas culinarias propias de México, como los chilaquiles, los tamales o el pan de pulque, todo bien regado con un café de olla (que es un delicioso café típico especiado con canela y piloncillo).
Una vez con fuerzas os recomiendo dar un paseo por Real del Monte, también conocido de forma abreviada como "el Real". El pueblo ofrece una pintoresca estampa con tiendas y música, así como actuaciones, mercado y otros entretenimientos. Tiene una bonita iluminación por la noche. También cuenta con un antiguo lavadero, y otros monumentos como el memorial al minero desconocido o la Iglesia.
La región es conocida por la fabricación de artesanía y por el trabajo de la plata que se extraía de las minas, especialmente durante la época de la ocupación inglesa. De esa pertenencia al Reino de Gran Bretaña, deriva su nombre.
Qué hacer en la zona de Real de Monte en el Estado de Hidalgo
Las minas de plata se pueden visitar todavía. Si el tema os interesa, os recomiendo visitar el museo Mina de Acosta, porque allí se hace un recorrido por la historia de la minería del pueblo. La tradición minera inunda toda la cultura del Real e incluso de esa zona de México. Considerado un pueblo mágico, su legado se considera indispensable para conocer y adentrarse en la historia y cultura mexicanas.
Muy cerca del pueblo se encuentra la ciudad de Pachuca, un lugar más actualizado (aunque con menos encanto) en el que puede encontrarse cualquier servicio que podáis necesitar. Lo mejor de Pachuca es que, como capital del estado de Hidalgo, recoge algunas de las muestras de artesanía más bellas del estado que además, están comprometidas con el desarrollo artesano y el comercio justo. Allí podéis comprar los tradicionales tenangos bordados a mano, unos chales bordados muy coloridos y animados.
Para los que os guste caminar y las rutas de senderismo, os recomiendo visitar el Parque Nacional “el Chico”. Se trata de un gran parque del estado de Hidalgo con bosques gigantescos y formaciones rocosas increíbles. No en vano fue la primera zona natural protegida en México.
El pueblo de Real del Monte es sin duda el más bonito de Hidalgo, siendo este estado uno de los menos conocidos de México. Si tenéis ocasión, animaos a conocer un México tradicional y desconocido comenzando esta visita en Real del Monte, el pueblo minero más encantador del estado de Hidalgo.
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