Turandot es uno de los restaurantes más lujosos de Moscú. Ocupa un solar de 65.000 metros cuadrados en el bulevar Tverskoy nada menos y puede albergar hasta 500 personas.
Pero lo más espectacular de todo es la forma en que está decorado, como si fuera un palacio barroco lleno de obras de arte al más puro y extravagante estilo siglo XVIII.
Más de cien artistas parecen haber contribuido a este derroche visual repleto de mármoles venecianos, esculturas, espejos envejecidos, frescos, flores exóticas, jarrones y otras porcelanas chinas y japonesas.
Mientras los clientes cenan les acompaña un cuarteto de harpas que interpreta a Mozart, aunque aquí parece que la comida es secundaria y lo importante es disfrutar del ambiente.
Vía | Travel NY Times