¿Que nos puede ofrecer la capital alemana estos días? Para empezar los típicos mercados navideños. En Berlín encontraremos más de 50 de estos tradicionales mercadillos que se remontan al siglo XV. En ellos podremos encontrar infinidad de objetos navideños y sabrosos dulces como el pan de miel, las almendras tostadas o el vino caliente con canela, ideales todos para combatir el frio de diciembre. El más importante es el llamado Mercado de los Gendarmes.
Las compras en el boulevar Unter den Linden, donde llama la atención el mercado de gansos vivos frente al restaurante Lindenlife. Y es que la tradición navideña en Alemania es comer ganso rostizado, acompañado de col roja y albóndigas.
No debemos dejar de acudir a patinar frente a la Puerta de Brandenburgo, donde la noche del 31 de diciembre celebraremos la llegada del nuevo año con la algarabía típica de estas fechas, pero al estilo alemán. Si acudimos a alguno de los numerosos hoteles que organizan bailes y cenas tendremos la posibilidad de ser trasladados en limusina para ver los fuegos artificiales de media noche. Si por el contrario optamos por pasar la noche por nuestra cuenta, habrá numerosos pubs en los que ir haciendo un alto para entrar en calor.
Por supuesto, la oferta cultural está repleta de Museos y Exposiciones, hay más de 170 donde elegir que abarcan todas las épocas y estilos, así como de numerosas actividades para todos los gustos.
Si te decides a ir esperamos que a la vuelta nos cuentes tu experiencia.
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