Sucede que en esta época del año el sol nunca acaba de ocultarse ni acaba de salir por lo que la ciudad queda en una penumbra constante, como en un amanecer eterno.
Este año, como todos, se celebra el 15º Festival de las Noches Blancas entre el 10 de mayo y el 26 de julio con la Opera de Kirov en el Teatro Mariinsky y el ballet en el Bolshoi como atracciones principales. Además, hay conciertos de música clásica, danza y ópera en teatros, parques y patios con el incomparable marco semi iluminado de la ciudad rusa de San Petersburgo.
Uno de los ritos tradicionales que se llevan a cabo durante estos meses es la apertura de los puentes que dejan paso a los barcos y barcazas.
Una buena época para disfrutar de una ciudad monumental.
Vía | Bitácora de viajes Más información | rusiamia.com | sanpetersburgo.com | viajearusia.net