Para esta ocasión, el museo alemán seleccionó cerca de doscientos trabajos de artistas como Erro Olafsvik, Oyvind Fahlstrom, Jean Jacques Lebel y Artur Kopcke, todos ellos representantes de un movimiento que hizo furor en distintas ciudades de Europa allá por los años 60 y que se dedicó a combinar las técnicas del surrealismo, dadaísmo, pop-art y fluxus, aplicándolas a la creación de manifiestos políticos ilustrados.
La propuesta de estos creadores durante aquella convulsionada época, era la de mostrar al mundo las consecuencias inmediatas que habían dejado las guerras mundiales en el imaginario colectivo de los europeos, y de cómo ellas se podían catalizar a través del arte. Es por eso que quien tenga la posibilidad de recorrer la galería se encontrará con escenas en las que aparecen retratos de bolcheviques, Stalin dirigiéndose a su pueblo, folletines propagandísticos de Mao-Tse-Tung y algunas caricaturizaciones sobre Nietzcshe, Lenin y Marx. Si bien toda la muestra es muy interesante y de un enorme valor histórico, alguna de las piezas que no deberías dejar de ver son “La hija de Stalin” de Erro Olafsvik y la mini colección de cuadros de Oyvind Fahlstrom (artista y poeta sueco) quien se apartó de la técnica de la pintura y armó piezas con una gran carga ideológica, combinando cómics, recortes de periódicos, fotografías y folletería de propaganda política.
Si vas a estar en Leipzig antes del 26 de febrero no dudes en asistir a esta exposición, ya que no sólo te asombrarán las obras de estos eclécticos artistas, sino que además, podrás disfrutar de las modernas instalaciones del museo, uno de los más importantes de Europa.
Sitio Oficial | Museo Nacional de Bellas Artes de Leipzig Info Leipzig | Leipzig.de