Viajar a Salamanca es garantía de descubrir no sólo una ciudad maravillosa sino también una provincia llena de atractivos. Anteriormente os hemos hablado de la Peña de Francia, y hoy queremos fijarnos en el pueblo que encontramos justo abajo, La Alberca.
La Alberca está situada a 73 kilómetros al sur de Salamanca, pegadito a la Peña de Francia. El encanto del lugar es innegable, y es uno de esos pueblos en los que querrás perderte para respirar su ambiente y descubrir cada rincón. Por algo fue la primera población rural en ser declarada Monumento Histórico Nacional. Y se lo merece.
Pocos pueblos pueden presumir de mantener en su centro histórico la esencia de una tradición que ya tiene siglos, pero La Alberca en eso puede sacar pecho. Encima está en un paraje rodeado de bosques, vegetación y montaña... de modo que más vale que vayas preparado con la cámara de fotos porque tendrás mucha tarea por delante.
Paseando por La Alberca descubrirás las hermosas casas hechas de granito y piedra con vistosas vigas de madera, los soportales de la Plaza Mayor preciosa o la Iglesia del siglo XVIII.
Y si os gustan los embutidos, podréis comprar jamones, chorizos y quesos a granel en una de las muchas tiendas que pretenden aprovechan el tirón turístico del lugar.
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