Hay una gran diferencia entre empezar un viaje con buen pie a no hacerlo. Aunque luego todo puede remediarse, ¿no sería mejor saber de antemano qué hora es más adecuada para tener un vuelo feliz?
Esto es lo que ha desvelado un estudio realizado por HappyOrNot, la empresa que fabrica los terminales con caritas para conocer la satisfacción de los clientes en diferentes instalaciones y áreas comerciales.
Con el objetivo de descubrir cuál es la hora en la que los usuarios viajan más contentos, han analizado las opiniones de más de 7 millones de clientes en aeropuertos de 30 países en todo el mundo. El resultado es, de entrada, sorprendente.
Si feliz quieres viajar, tendrás que madrugar
Los datos hacen referencia al primer trimestre de 2023, y nos indican que la mejor hora para volar son las 4:00 a.m. y la peor entre las 10 y las 11 p.m.
Así lo han puntuado los viajeros. A las 4:00 de la mañana hubo un 85,2 % de comentarios positivos, con las 7:00 a.m pisándole los talones, con un 84,8 % de caritas sonrientes. En cambio, las peores notas, con solo un 76,4 % de valoraciones favorables, se las llevaron las 22:00 y 23:00 horas.
En realidad volar al amanecer no es tan raro. Son pocas las personas a las que les gusta levantarse temprano para ir a trabajar o a estudiar, pero cuando se trata de viajar… estamos frescos como una lechuga.
Además, ahora que los vuelos han recuperado las cifras de pasajeros anteriores a la pandemia, escoger las primeras horas de la mañana puede ser una garantía de que habrá menos gente y estaremos más tranquilos.
Algo parecido pasa con los días de la semana. El mejor día para volar es el miércoles, con un 83,7 % de comentarios positivos y el que menos nos gusta el domingo, con un 79,9 %.
Menos retrasos y todo el día por delante
Tal como indican los pilotos expertos, los que madrugan tienen más posibilidades de llegar a su destino sin retrasos ni interrupciones. Los primeros vuelos del día son los más puntuales y los que sufren más demoras son los de última hora de la tarde. La causa es el efecto bola de nieve que se produce con todas las incidencias que se acumulan a lo largo de la jornada.
Por otra parte, qué gozada llegar pronto al destino y poder aprovechar entero el primer día de vacaciones, ¿verdad? Sin embargo, levantarse a las dos de la madrugada, en el mejor de los casos, para llegar al aeropuerto a las tres y partir a las cuatro quizá es un poco exagerado.
Si el destino no está muy lejos, las 7:00 a.m es una hora ideal también para que el viaje sea fantástico, y sin matarnos de sueño.
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