El dulce de leche, ese manjar cremoso y dulce que ha sido un ícono en la repostería latinoamericana durante generaciones, está viviendo un momento de auge en Estados Unidos. Lo curioso no es solo que este sabor esté conquistando paladares norteamericanos, sino que también se ha vuelto un fenómeno viral... ¡gracias a un frappe de McDonald’s!
La bebida, que combina el clásico dorado del dulce de leche con una textura cremosa y refrescante, ha encendido las redes sociales. Sin embargo no ha sido su sabor el detonante de su éxito, sino el reto que supone para los norteamericanos pronunciarlo.
Miles de vídeos de usuarios intentando pronunciar "dulce de leche", con resultados que van desde entrañables intentos hasta hilarantes conversaciones que se producen al tratar de hacer un pedido, han generado millones de vistas, catapultando al producto a la fama.
El delicioso frappe que se ha convertido en un reto lingüístico
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El éxito del dulce de leche en Estados Unidos no es casual. Su sabor único, que recuerda sutilmente al caramelo pero con el toque lácteo que aporta la leche, tiene un atractivo muy especial para los paladares acostumbrados a los sabores muy dulces. Además, su versatilidad lo hace ideal no solo para bebidas como este frappe, sino también para helados, pasteles y hasta galletas.
En cuanto a la popular bebida, muchos la describen como "indulgente, adictiva y exótica" y por eso se ha convertido en una novedad irresistible, a pesar de las 630 calorías que tiene el tamaño mediano.
Aunque el dulce de leche ya era conocido gracias a la comunidad latina que vive en Estados Unidos, el frappe de McDonald’s ha logrado introducirlo al mercado de forma masiva gracias a esta campaña inesperada. Y aunque para muchos americanos siga siendo un reto pronunciar "dulce de leche", lo que está claro es que no pueden resistirse a disfrutarlo.