Al parecer, el personaje originario de Hong Kong pero residente en Alemania, fue engañado por otro supuesto turista que lo usó como cebo llevándolo al bar y sirviéndole una cerveza que le dijo le costaría nada más ni nada menos que 990 euros.
Claro, como al turista le pareció un tanto caro, luego de una discusión consiguió un importante descuento de 500 euros, aunque en la tarjeta de crédito igualmente le cobraron los 990. Y por más que intentó denunciar la estafa en el momento dijeron no entenderle porque hablaba inglés.
Es el récord pagado por una cerveza hasta el momento, aunque unos meses atrás un turista estadounidense pagó 980 por dos cervezas.
Hombre, Roma está caro… pero tampoco para tanto.
Vía | Reuters | El correo digital