Así, se han reemplazado las antiguas lámparas de xenón por la última tecnología LED, de modo de lograr, a través de este sistema, una iluminación que se asemeja a la luz del sol.
Pues la renovación se dio gracias al trabajo en conjunto que realizan Toshiba y el Louvre y que ya cuenta con otras zonas iluminadas de manera inteligente. Pero en esta ocasión lo que se buscó fue devolverle la luz y el color a la obra de Da Vinci que lleva ya algunos años sin ser restaurada.
Pero no ha sido un trabajo sencillo, dado que para lograr el resultado final se han invertido 18 meses. Un año y medio buscando una iluminación natural y que no afecte a la obra. "Hemos trabajado mucho con la temperatura del color y el índice de reproducción cromática. Teníamos que compensar los colores deteriorados y el aspecto verdoso del vidrio que protege La Gioconda", explicó M. Segawa, director de Tecnología Toshiba Lighting.
Claro, es que las bombillas LED emplean componentes electrónicos que logran que no se disperse el calor, ahorrando así energía y evitando que la pintura se deteriore.
Para la Gioconda se han utilizado 34 bombillas ocultas en el marco de la pintura y se han incorporado nuevos sistemas ópticos que dan como resultado una iluminación uniforme. Además, cuenta con un sistema de control, que permite ajustar la potencia de luz.
"Los espectadores van a poder ver los colores originales que Leonardo quiso reproducir cuando pintó el cuadro. Gracias al sistema que hemos puesto en marcha, estamos más cerca de la verdadera luz natural. Ahora, gracias a la tecnología LED, podemos dialogar con la luz y tener la luz inteligente. Podemos iluminar en función del color del cielo en el exterior y el tipo de ambiente que quieres crear. Hay muchas aplicaciones que se pueden poner en marcha. Es una revolución como Internet ha revolucionado la manera de comunicarse", manifestó François Seguineau, vicepresidente europeo de Toshiba Lighting.
Vía | El Mundo Foto | Flickr de simenon En Diario del Viajero | 100 años del robo de La Gioconda