Hace unas pocas semanas volvía a Niza para dejarme envolver en su encantadora atmósfera. Una vez más, caí encantada por el color de las paredes de su casco antiguo, el perfume de las flores en el mercado, el arrullo del mar en sus playas o desde sus terrazas al Mediterráneo, las maravillosas vistas desde el Parque del Castillo, el sabor de sus platos típicos (incluyendo la tradicional socca).
En esta oportunidad iba con más tiempo. Niza no era sólo una parada en un recorrido por la Costa Azul. te recomiendo que le des su espacio, para poder aprovechar lo mucho que ofrece esta ciudad de larga historia y muchos atractivos. Descubrir, por ejemplo, que además de muchos ejemplos de glamour Niza tienen una activa vida cultural propia.
Visitar, por ejemplo, el magnífico Museo de Arte Moderno y Contemporáneo, o MAMAC.
Como decía, en esta visita no me limité a tomar Niza como eje de una visita a la Costa Azul, le dediqué su tiempo y me traje una buena lista de actividades y sitios que visitar. Niza es la segunda ciudad francesa que más museos alberga. Son 19 incluyendo el de Matisse, el de Chagall, el "teatro" de la Fotografía y la Imagen y el MAMAC.
A partir de la Plaza Massena, el corazón de la ciudad, se abre un bulevar y parque entre las avenidas Jean Jaurés y Félix Faure. Un espacio abierto con áreas verdes, juegos para niños y esculturas que te llevan en un agradable paseo hasta el complejo donde se encuentra el Teatro Nacional y, detrás del mismo, el edificio del MAMAC.
Sus formas contemporáneas se enfrentan sin conflicto a la arquitectura señorial de Niza. Un gran atrio a cielo abierto te recibe con ejemplos de esculturas de grandes autores como Calder. Ya en el interior, los espacios se dividen en amplias salas distribuidas en varias plantas.
En la primera planta se muestran las exhibiciones temporales, sierpe con grandes firmas de panorama artístico contemporáneo: instalaciones y nuevas tendencias como balcón al arte de hoy y del futuro.
La segunda y tercer planta están dedicadas a obras modernas y contemporáneas de gran impacto. Vemos desde fotografías de Robert Mapplethorpe, pasamos por instalaciones cinéticas, grandes firmas (Bacon, Moretti, Haring, Max Cartier, Serra, Klein) y espacios de experimentación artística.
Para finalizar este paseo por el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Niza, podrás hacer algo muy curioso: caminar por el techo del edificio. Desde la última planta, hay una escalera que te llevará hasta la azotea. Allí hay un circuito de unos 250 metros lineales por los techados curvos del museo, en una suerte de cadena de puentes y terrazas que te regalarán vistas inolvidables de Niza, la capital de la Costa Azul.
Fotos | María Victoria Rodríguez