A medio camino entre Madrid y Guadalajara se encuentra una de las excursiones más bonitas que podemos hacer en un día desde la capital española. A una hora y poco de Madrid y a escasos 45 minutos desde Guadalajara se encuentran las Cárcavas, un impresionante paraje natural que parece sacado de una película de ciencia ficción ambientada en Marte.
Si buscamos en Google este paraje podemos encontrarlo con múltiples nombres: las Cárcavas de Patones, las del Pontón de Oliva, las de Valdepeñas de la Sierra... pero todos se refieren al mismo lugar, ubicado en el municipio de Valdepeñas de la Sierra en la provincia de Guadalajara.
No obstante, si queremos hacer una ruta, la más fácil y famosa es la que comienza en Pontón de la Oliva (en Patones, Madrid), de ahí que podamos encontrar información sobre este lugar con diferentes nombres (y ubicaciones, lo que puede resultar algo confuso).
Independientemente de como queramos denominar a este lugar, en algo en lo que todos seguramente estemos de acuerdo es que parece que nos trasladamos, no solo de país o continente, si no de planeta: las tierras arcillosas moldeadas por el paso del tiempo han dado como resultado una geografía más propia del planeta Marte, que de la Tierra.
Si escogemos realizar la ruta desde el aparcamiento de Pontón de la Oliva, tan solo tendremos que andar unos 40 minutos hasta dar con el impresionante paisaje marciano. Eso sí, se trata del camino más corto pero el más empinado, así que hay que ir concienciado y preparado para subir hasta el mirador.
No obstante, podemos optar por una ruta más larga (y circular) que empieza junto al curso del río Lozoya y que nos llevará hasta el pueblo de Alpedrete de la Sierra (en Guadalajara), desde donde conduciremos hasta el punto más alto de las Cárcavas y realizaremos una cuesta abajo hasta el mirador de los cañones del Lozoya.
Decidamos lo que decidamos, visitar las Cárcavas es una experiencia fascinante que, además de mantenernos en forma y proporcionarnos un poco de aire puro, se convertirá para muchos en un lugar muy especial, digno de fotografía.
FOTO DE CABECERA POR LLEGAR SIN AVISAR