Los arqueólogos del Instituto de Arqueología de la Universidad Hebraica de Jerusalén, han encontrado hace unas semanas lo que creen es la tumba de este Rey en su magnífico Herodion. Un palacio-fortaleza construida por él al borde del desierto y que eligió para que fuera además, su sepultura.
Después de muchos años de excavaciones en el lugar, los restos de unos adornos o rosetones que habrían decorado el sarcófago real, dieron la pista que se estaba frente a la tumba, hasta entonces, sin descubrir.
Herodes era conocido como "Herodes el Grande" y fue nombrado Rey de Judea por Roma. Sumó bajo su mandato a Galilea, Samaria e Idumea desde el año 40aC hasta su muerte. Según la tradición cristiana, suya fue la idea de matar a todos los niños en la Matanza de los Inocentes. También se le conoce por haber impulsado la expansión del Segundo Templo de Jerusalem, un santuario del pueblo de Israel, situado en la explanada del monte Moriah, en la ciudad de Jerusalén, donde se ubican en la actualidad las mezquitas de La Roca y de Al-Aqsa.
Las excavaciones del palacio de Herodión fueron iniciadas por unos monjes franciscanos a finales de los años 50 y a partir de 1972 tomó el relevo un equipo de arqueólogos israelíes. Esta noticia de gran relevancia arqueológica, no deja de ser utilizada, lamentablemente, tanto por israelíes como por palestinos para enfrentarse una vez más. El hallazgo es la prueba de la legitimidad del pueblo de Israel en esas tierras (según unos), o puede demostrar la sumisión de un pueblo soberano por un poder gobernante extranjero (según otros).
De todas formas, seguramente en el futuro cercano habrá que incorporar un nuevo punto en nuestro itinerario por Israel.
Diario del Viajero | Vacaciones excavando en Israel Vía | Diario Clarín