Nos estamos acostumbrando a los recortes en los viajes en avión. De que fuera una experiencia cara pero llena de comodidades, estamos llegando a que casi pierda todo aquello que tenía, pero es que ahora el último debate está en que las aerolíneas empiezan a pedir que haya un único piloto en cabina para reducir costes en lugar de dos. Rebaja de personal, rebaja de costes.
¿Terminará esto siendo posible? ¿Es una locura que llegaremos a ver? Nunca se sabe, pero viendo cómo avanza esto, quizás está más cerca de lo que nunca pensamos. Vuelos comerciales con un único piloto al mando... y cada vez menos personal atendiendo a los pasajeros.
No es algo que sea un simple rumor, sino que más de cuarenta países, entre los que se incluyen Alemania, Reino Unido y Nueva Zelanda, han pedido al organismo de Naciones Unidas que marca los estándares de la aviación que les ayude a que los vuelos con un único piloto sean una realidad. Una realizad segura.
Es más, la EASA incluso ha tenido reuniones con fabricantes de aviones comerciales para plantearse si esto es posible y cuales podrían ser las reglas a marcar y empezar a revisarlo todo. Incluso se atreven casi a dar una fecha: 2027.
¿Es seguro llevar un único piloto en cabina?
Esa es la primera duda que se nos plantea a todos, si ser´á seguro llevar un único hombre a los mandos de un pájaro de hierro que lleva a cientos de personas a bordo. Bien es cierto que las cabinas están cada vez más automatizadas, que (desde mi desconocimiento) se vuela confiando más en la tecnología que en el ser humano que va a los mandos, pero aún así, fiarse de una única persona, que pueda verse sobrepasado por la situación o una indisposición es, quizás, algo temerario.
Es más, es algo que ya pasó como en el vuelo de Air France 447 que volaba de Río a París en 2009. El capitán descansaba mientras los dos copilotos estaban al mando en el cockpit y empezaron a recibir lecturas de error de velocidad. Cuando el capitán despertó y llegó a cabina, en menos de dos minutos ya era tarde para recuperar la estabilidad y cayeron al mar. Toda una catástrofe aérea.
Como contraste, en cantidades de accidentes aéreos que no terminaron en tragedia, la colaboración de un segundo piloto fue siempre la clave para evitar males mayores.
Las razones de las aerolíneas
Por supuesto es la que nos ronda a todos por la cabeza: el gran ahorro en gastos de personal. Si ya se han ido reduciendo los números de TCPs ahora le toca a intentar reducir el de pilotos, con sueldos tradicionalmente más altos.
Por supuesto no sería una implantación radical, sino que se pasaría por un primer paso de permitir que piloten solos cuando vayan en fase crucero, es decir, el período menos estresante del vuelo (nada de aterrizajes o despegues), lo que permitiría que el otro piloto pudiera ir descansando en cabina, alternando descansos, por lo que con dos se podrían hacer rutas mucho más largas sin necesitar un tercero como ahora.
¿Está cerca el cambio?
Pues quizás está mucho más cerca de lo que pensamos, y por muy peregrina que nos pueda parecer la idea, más que aquella idea de Ryanair de que la gente viajara de pie para ahorrar espacio y poder meter el doble.
Los fabricantes de aviones ya trabajan para automatizar al extremo los vuelos de manera que sólo sea necesaria una mínima supervisión del piloto, y que el propio sistema detecte que el piloto, por la razón que sea se encuentra incapacitado y se "auto aterrice" en un aeropuerto preseleccionado. No os asustéis, que de todas maneras esto no está previsto, mínimo, hasta 2030.
Habrá que seguir muy atentos a ver cómo evoluciona todo esto, si es el futuro o queda realmente en agua de borrajas. Eso sí, pase lo que pase, será siempre garantizando la seguridad de todos los que van a bordo.