Justo hace un par de días compartía con vosotros un video inspirador sobre Yosemite y hoy os invito a lanzaros a la aventura de realizar el trekking más famoso del parque nacional.
La caminata más emblemática en el Parque Nacional abrió la semana pasada, cuando el Servicio de Parques anunció que los cables se encontraban en su lugar en la “media bóveda”, ese promotorio gigante de granito que es uno de los monumentos más reconocidos en este parque.
Durante los meses de verano, la subida del “Half Dome” se ha convertido en una atracción popular en Yosemite, tanto es así que es necesario sacar un permiso para ascender las más de 16 millas hasta la cumbre.
A lo largo de la ruta, los excursionistas ascenderán hasta más de 4800 metros de altura, lo que significa que el camino se hace muy fuerte y vertiginoso en algunos puntos. Con el fin de hacer el viaje más seguro y más accesible, el Servicio de Parques Nacionales instala cables de metal cada año.
Estos cables sirven como asideros para aquellos que hacen el viaje a la cima, son de gran ayuda para subir las secciones más peligrosas de la pista.
Como os podéis imaginar, la subida del “Half Dome” es intensa, y no sólo por las dificultades físicas de la pista. Durante el verano, en el valle de Yosemite suelen hacer altas temperaturas, que pueden causar problemas para los excursionistas que no llevan suficiente agua con ellos. Además por las tardes es my probable que nos sorprenda alguna tormenta inesperada.
No creo que estar sobre una roca a muchos metros de altura cuando el cielo comience a crugir sea el lugar que más nos apasione.
Pero los que hacen se animan y se lanzan a hacer este trekking tendrá la recompensa de unas vistas de la campiña californiana únicas. Yosemite está considerado uno de los más bellos paruqes nacionales del mundo, por lo que tener una panorámica del mismo desde las alturas sin duda merecerá la pena.
Imagen | .Bala
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