Se acerca la mayor fiesta popular en Tailandia, el Songkran o Año Nuevo que se festeja entre el 11 y el 15 de abril. Durante estas vacaciones, se registra un número impresonante de accidentes viales a causa del consumo de alcohol.
El año pasado se registraron 30.000 víctimas (entre muertos y heridos) a causa de los conductores de todo tipo de vehículos conduciendo borrachos. Tanto en las grandes ciudades como en los pequeños pueblos, y especialmente en las carreteras comarcales, la gente se lanza de un pueblo a otro totalmente fuera de control.
En una campaña para tratar de disminuir el consumo de alcohol y las consecuencias trágicas de este hecho, muchos grupos ciudadanos están apremiando al gobierno tailandés para que apruebe una norma para que durante el Songkran, se prohiba la venta de alcohol... a turistas.
La noticia me asombra ya que, a simple vista, no creo que los turistas sean el grueso de esos 30.000 víctimas. Muchas (por no decir la mayoría) deben ser nacionales que se lanzan en motos y camiones sobrecargados de gente y borrachos, por lo que prohibir a los extranjeros que consuman puede influir, es cierto, pero en una pequeña proporción.
Es verdad que Tailandia es uno de esos destinos donde los extranjeros "se sueltan la melena" y no siempre se comportan como debieran. Tampoco abogo por el consumo de alcohol ni mucho menos. Es que simplemente me parece que prohibir al turista que beba durante los festejos del Songkran, es como querer tapar el sol con una mano.
Vía | Channel News Asia Diario del Viajero | Tailandia