Si bien Jaisalmer es una ciudad a la que por sí sola podríamos dedicar varios días, hay un par de excursiones que no debemos pasar por alto cuando nos encontremos visitando la ciudad dorada de Rajasthán. Entre ellas, sin duda alguna destaca la visita a Bada Bagh, nombre que literalmente significa "Gran Jardín".
Y es que eso es Bada Bagh: un espléndido conjunto de cenotafios rodeados por un gran jardín que, dada su situación en pleno desierto, otorga al lugar un aspecto casi irreal, ilógico. La explicación a semejante “milagro” la encontramos en una presa que, hace ya siglos, uno de los maharajás mandó construir en el lugar para facilitar la irrigación.
El conjunto monumental de Bada Bagh está formado por varios cenotafios del siglo XVI en adelante, construidos tras la muerte de algunos de los más importantes maharajás de Jaisalmer. Como su nombre indica, los cenotafios de Bada Bagh no son tumbas: tan sólo construcciones funerarias simbólicas, ya que dada su religión, los maharajás no eran enterrados, sino incinerados para posteriormente arrojar sus cenizas al Ganga.
En la parte superior de la colina se encuentran los cenotafios de las esposas de la familia real. Esta zona resulta especialmente impresionante, ya que muchas de estas mujeres no fallecieron por causas naturales sino que, tal y como mandaba el antiguo rito del satí, tras la muerte de su marido se suicidaban saltando a la pira de incineración de éste.
Bada Bagh se encuentra situado a unos 6 kilómetros de la ciudad de Jaisalmer, por lo que resulta sencillo acercarse hasta allí en unos minutos alquilando una moto o solicitando los servicios de un rickshaw. El conjunto se presenta aún más hermoso a la puesta de sol, motivo por el cual a esa hora el lugar se llena de turistas. Dicho esto, sólo queda una duda por resolver: ¿mejor disfrutarlo en soledad, o en hora punta para sacar la mejor fotografía?
Foto | Carmen en Flickr En Diario del Viajero | Dormir como un nómada en el desierto del Thar, Bienvenidos a Bollywood: el cine Raj Mandir de Jaipur