Hoy quiero hablaros de un plato curioso y bastante popular entre la “comida rápida” de Indonesia: las Bakso o, según su nombre en inglés: meatballs. Esto es: las albóndigas de toda la vida, con alguna particularidad que hace que comerlas sea todo un juego.
Aparentemente, las bakso no tienen nada que las diferencie de unas albóndigas de carne normales. Si acaso, su presentación: normalmente en un pequeño bol y sumergidas en caldo, como si fuesen parte integrante de una sopa de verduras, al que además se pueden añadir diferentes salsas a gusto del consumidor.
El matiz viene al comerlas. Su textura es algo gomosa, y si bien pueden ser únicamente de carne, suelen estar rellenas de los más diversos ingredientes: queso, champiñones, pimiento, chili picante... Lo que hace que, al pedirlas variadas, el comensal no sepa qué es lo que va a encontrar en su interior.
Resulta divertido pedirlas con amigos, y que sólo una sea la albóndiga “maldita” con chili picante. Para los paladares no acostumbrados, la sorpresa está asegurada, ya que el chili de Indonesia... pica bastante.
Puede que no sea mi comida preferida dentro de la variedad que encontramos en la cocina indonesia, pero resultan una buena solución cuando queremos comer algo rápido, saliéndonos un poco del tradicional nasi goreng (arroz frito) o el también muy popular gado-gado.
Ya sabéis, si viajáis a Indonesia, probad sus bakso o albóndigas rellenas, ¡pero cuidado al hincarlas el diente!
Imagen | Carmen En Diario del Viajero | Costumbres de Asia: los Food Court (o comer en la calle), El Durian: la fruta reina... del mal olor